Podemos apuesta en Arévalo por potenciar la situación estratégica de la ciudad como nudo logístico

El secretario autonómico de Podemos ha dado voz a reivindicaciones de La Moraña, como la subvención de trayectos ferroviarios desde Arévalo hasta Valladolid, ya que «hay mucha gente que tiene que desplazarse por temas de estudios o trabajo». Ha recordado que los trayectos hasta Madrid sí cuentan con ayudas, pero no sucede así cuando el destino es la capital vallisoletana. 

Desde Podemos han dirigido un reproche a la Junta de Castilla y Léon porque «Arévalo es un nudo logístico muy importante y está en una situación estratégica, pero si no hay políticas que promuevan el dinamismo económico acabará en estado de franca depresión».

Otra reivindicación repetida por los arevalenses es la mejora del Centro de Salud, ya que «lleva años» postergándose. Las mejoras «se comprometen« pero «no se ejecutan», otro «ejemplo de las promesas incumplidas del Partido Popular», ha señalado Pablo Fernández.

El sector primario ha sido foco de preocupación en las papeletas depositadas en la urna: después del «catastrófico año climático» que sufrió la comunidad el año anterior y las «condiciones adversas» del presente, Pablo Fernández considera que la Junta no ha destinado las subvenciones necesarias para que agricultores y ganaderos superen las circunstancias «que han arruinado cultivos y cosechas». En ésa línea, ha defendido que la Administración no debe ser únicamente un «gestor de fondos», sino también un administrador que los destine «a quien tiene mayor necesidad».

Por último, ha incidido en la necesidad de un Plan de Segunda Oportunidad que beneficie a PYMES y autónomos, como «pilar fundamental» y elemento de dinamización de la comarca morañega.

«Es una ciudad olvidada y ninguneada por el Partido Popular, que está a medio camino entre Madrid y Valladolid pero ambas capitales le han dado la espalda», ha lamentado Fernández. En ese sentido, ha reprochado a la Administración Autonómica que «se desprecie a Arévalo».

En su opinión, no hay mejor forma de palpar las necesidades de la ciudadanía que escuchando «a pie de calle»; ha confiado en que la primavera de 2019 traiga un cambio de Gobierno que garantice que, «por fin, las personas sean lo primero».