La Diputación de Ávila facilita los estudios preliminares en la Torre del Portazgo y el puente de Valladolid

Esta actuación ha estado enmarcada en el Programa de Recuperación de Recintos Amurallados promovido por la institución provincial en municipios que cuentan con este tipo de fortificaciones y o bien ya están declarados, o están en vías de conseguir la declaración de Bien de Interés Cultural, según ha recordado el diputado responsable del Área de Cultura, Patrimonio, Juventud y Deporte, Eduardo Duque, en una visita en la que ha estado acompañado por el arqueólogo Juan Ignacio García, en la que estuvieron presentes el alcalde de Arévalo, Vidal Galicia Jaramillo y el arquitecto municipal, javier Bretón.

En el marco de esta línea de ayudas, la Diputación de Ávila ha concedido una subvención al Ayuntamiento de Arévalo para realizar varios sondeos en la Torre del Portazgo y el Puente de Valladolid, una de las principales entradas, si no la más importante, que tuvo la ciudad, ya que se encontraba en la antigua calzada que unía Valladolid con Toledo, pero que hoy se encuentra en un avanzado estado de deterioro, desde que a principios de los años 70 se derruyó una parte importante, por lo que se construyó un puente nuevo y este quedó sin uso ni mantenimiento, lo que ha provocado su estado de ruina actual.

La actuación ha tenido como finalidad obtener datos que servirán para despejar dudas sobre la fecha de origen del puente y de la torre, así como su relación con la muralla, ya que la Torre del Portazgo era una de las puertas de la muralla, aunque desapareció casi en su totalidad en el siglo XIX.

En este sentido, tal como ha señalado el director de las excavaciones realizadas, Juan Ignacio García, se han realizado varios sondeos que han permitido analizar la estructura de la torre y buscar, asimismo, una posible calzada de acceso a la ciudad por esta parte del municipio.

La actuación realizada en los restos de la Torre del Portazgo ha permitido hallar los posibles apoyos del arco de entrada, que se estima sería de doble puerta y tendría un vano de más de tres metros de anchura.

Asimismo, los sondeos han posibilitado encontrar la base de la torre, de carácter compacto, realizada en piedra caliza y mortero de cal y de una gran solidez, con el objetivo de servir de base a la torre, que podría haber llegado a medir ocho metros de altura, divididos en tres pisos de unos dos metros cada uno y un tejadillo.

En cuanto al Puente de Valladolid, las fuentes históricas apuntan a un origen mudéjar, pero dispone de muchas fases constructivas y numerosos materiales diferenciados, de modo que, tras los sondeos, se han extraído datos que ayudarán a fechar su origen, si fue en el siglo XIII, por los arcos apuntados con los que cuenta, de estilo gótico, o anterior, tras los sondeos en la cimentación que se han realizado.

Sí está documentado y así se ha podido comprobar en las catas realizadas, que en el siglo XVI se llevó a cabo una gran transformación de esta infraestructura, con la incorporación de bloques de granito.

Este puente fue incluido en la Lista Roja del Patrimonio en octubre de 2010, a instancias de la Asociación de Cultura y Patrimonio ‘La Alhóndiga de Arévalo’.  En avanzado estado de ruina. Convertido en vertedero de basuras y escombros. Cubierto por vegetación.

Si no se hace una intervención en él, corre un grave riesgo de derrumbamiento total. Las gárgolas de evacuación de agua se encuentran taponadas por la vegetación, impidiendo la filtración del agua. Las raíces de las plantas y zarzas siguen dañando la estructura.

El deterioro de este puente comentó hace más de 50 años, cuando sufrió el derrumbe de 38 metros de su fachada este. Con la construcción del nuevo viaducto en la que éste se empotró en el extremo norte del viejo puente, podría estar amenazada su estructura. Hace una veintena de años se produjo un segundo derrumbe que provocó la pérdida del alfiz que recuadraba al arco.

El alcalde de Arévalo, Vidal Galicia, ha considerado que la actuación realizada ayudará a despejar dudas sobre el trazado que tenía la muralla de la antigua villa y, además, servirá de base para actuaciones posteriores de recuperación medioambiental y acondicionamiento de la zona.