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el norte
Sábado, 8 de octubre 2016, 18:48
La localidad abulense de Nava de Arévalo (820 habitantes) ha despedido hoy de forma emocionada y triste a M.B.M., de 33 años, supuestamente asesinada por su expareja, J.F.G., de 32, en la noche del pasado jueves en el cercano municipio de Arévalo, en presencia de la hija mayor de ambos, de tres años.
Según ha explicado a Efe Jesús Sanchís, alcalde en funciones de Nava de Arévalo, situado a 46 kilómetros al norte de Ávila, la iglesia de San Pedro Apóstol no ha podido acoger a vecinos, familiares y amigos de la fallecida, de manera que muchas personas han permanecido en el exterior del templo.
El funeral ha sido celebrado por el obispo de la Diócesis, Jesús García Burillo, quien ha tenido un recuerdo especial para los padres de la víctima y, sobre todo, para las dos hijas, de dos y tres años, de la fallecida.
Sanchís ha comentado que ese recuerdo ha provocado las lágrimas de algunos de los asistentes a una ceremonia religiosa presidida por el «silencio» y la «emoción».
Entre los asistentes, además de los padres y las dos hermanas de M.B.M., se encontraba el vicepresidente de la Diputación provincial, Carlos García, así como Vidal Galicia, alcalde de Arévalo, la localidad en la que se produjo el asesinato el pasado jueves por la noche.
Tras la misa, los restos de la mujer asesinada han sido enterrados en la más estricta intimidad en el cementerio de Nava de Arévalo, localidad en la que viven los padres de la joven y en la que los padres del detenido, natural de Madrid, tienen una casa.
La ceremonia religiosa y el entierro han coincidido con la declaración del detenido ante el juez del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Arévalo (Ávila), que ha decretado el ingreso en prisión, provisional comunicada y sin fianza, de J.F.G.
Se le considera el supuesto autor de la muerte en la noche del pasado jueves de M.B.M., de 33.
Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL), J.F.G. será investigado por un presunto «delito de homicidio/asesinato en el ámbito familiar».
Tal y como informó ayer la Subdelegación del Gobierno, el TSJCyL señala que "no había constancia de denuncias previas por parte de la víctima".
El asesinato de M.B.M. se produjo en torno a las 23 horas del jueves en el piso 1ºA del número 6 de la calle del Cedro, en Arévalo (Ávila), en presencia de una de las dos niñas que tenían ambos en común, tras una discusión que se había iniciado dos horas antes en la calle, según señalaron vecinos de la zona.
Según la Subdelegación del Gobierno, la mujer murió degollada en el interior del piso, después de que hubiera salido al balcón pidiendo socorro y sin que los vecinos del bloque ni los agentes de la Policía Local ni de la Guardia Civil pudieran acceder a la casa hasta que F.J.G. no abrió la puerta.
Fuentes de la Fiscalía han señalado a Efe que durante la declaración de hoy por parte de J.F.G., natural de Madrid, aunque muy vinculado a Nava de Arévalo, la localidad de la que era natural la víctima, el detenido no se ha mostrado arrepentido durante la declaración que ha durado algo más de una hora.
Estas mismas fuentes han apuntado que el detenido ha comentado que la mujer fue la que cogió un cuchillo mientras discutían y que se hizo unos cortes, antes de que el supuesto asesino le pusiera la zancadilla y, al caer al suelo, se hizo un corte en la cara.
Según fuentes de la Fiscalía, en ese momento, y siempre según el testimonio del detenido, fue la víctima la que le pidió que le matara.
Las mismas fuentes han comentado que J.F.G. se ha mostrado convencido de sus argumentos y ha tratado de convencer al resto de las partes de los mismos
Al final de la declaración ha llorado, antes de haber preguntado por sus dos hijas.
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