Gloria Lomana reivindica el talento sénior en 60+Activos

Después de casi cuarentaaños dedicados al periodismo, Gloria Lomana decidió emprender un proyecto personal, la asesoría 50&50GL, en la que intenta trasladar el aprendizaje propio de su experiencia en proyectos como 'Chicas imparables', destinado al fomento del talento de jóvenes de 15 a 18 años. Al margen de sus apariciones en medios de comunicación, hay algo que la periodista mantiene, y es el magnetismo, con el que atrapó al público congregado en el Festival 60+Activos, al que exhortó a mantener su actividad y a seguir desarrollándola. Firme creyente del talento sénior, Lomana considera «perjudicial» empezar a hablar de talento sénior con 55 años, «porque es cuando mejor se está, con más equilibrio, con más posibilidad de dedicarse a uno mismo...», por lo que rechazó restar valor a personas que superan dicha edad.

«En 'Chicas imparables' trabajo con chicas de 15 a 18 años, de las que aprendo mucho, pero valoro y creo que tenemos que valorar lo que estas generaciones pueden aportar. En otros lugares se está demandando experiencia, y en España va a pasar; hay personas mayores que están aportando mucho al mundo», aseveró, poniendo el clarificador ejemplo de Joe Biden, presidente de los Estados Unidos con 78 años. Así, a sus ojos, «a una persona de 55 años le queda mucho que aportar profesionalmente, porque, además, va a vivir mucho más», indicó, al tiempo que auguró que «el talento sénior va a ser reivindicado por las empresas inteligentes, porque la diversidad también es intergeneracional».

Lomana dedicó una recomendación a esas personas de más de 60 años a las que, circunstancialmente, se le empieza a empujar hacia la jubilación, y fue la de «seguir soñando». «Hay personas con talento sénior con más de 60 años, pero tienen que creer en sí mismos, en lo que pueden hacer y hacerlo», animó, con la mirada fija en el público, buscando sonrisas cómplices cuando afirmaba que «a esta edad te puedes dedicar a ti, seguir pensando y seguir haciendo». Como muestra, ella misma y su asesoría, donde desarrolla lo que considerada casi una obligación moral, «el traspaso de conocimientos a los más jóvenes», pero sin desdeñar a generaciones que sirven como referente, habida cuenta de que «se necesita la mirada de gente más mayor, de su equilibrio y sabiduría», para poder crecer.

El buen talento «es muy difícil de reclutar y retener» a cualquier edad y con independencia del género, aunque tradicionalmente la mujer ha tenido más problemas para desarrollar el propio. Así, hasta los años 60 no acudían a la universidad y, a menudo, se ha perdido «mucho talento femenino» según se llegaba a la treintena, dado que normalmente eran ellas (y siguen siendo) las que más concilian. Por ello, Gloria Lomana reivindica una igualdad efectiva entre hombre y mujer, alejada, eso sí, «de la radicalización de un feminismo que demanda conquistar todo el espacio, de la misma manera que se aduce que antes hacían los hombres». Lo importante, para ella, es un equilibrio entre cuatro esferas que todavía la mujer tiene que terminar de conquistar: la profesional, la familiar, la social y la personal, estas dos últimas, «a menudo abandonadas».

En su charla con Carlos Aganzo, director de relaciones institucionales de El Norte de Castilla, la periodista repasó también buena parte de su trayectoria profesional, a lo largo de la cual ha entrevistado a todos los presidentes del Gobierno de la democracia, salvo a Adolfo Suárez, labor en la que vivió alguna que otra anécdota, que contó, como cuando entrevistando a José Luis Rodríguez Zapatero perdió el pinganillo por el que recibía indicaciones, y durante la que intentó siempre hacer un buen periodismo, fundamentalmente, en televisión. «La televisión ha sido mi vida y me gusta mucho, siempre que se haga buen periodismo», afirmó con rotundidad, aunque sin dejar de tener palabras cariñosas hacia la prensa escrita y la labor de medios como El Norte o «la calidez y la cercanía» de la radio.

A la intervención de Gloria Lomana le siguió en el programa una interesante conferencia -patrocinada por Aquavall- de Silvia Sáez, enfermera y profesora en la Universidad de Valladolid, que recordó la importancia de consumir dos litros de agua al día, unos ocho vasos diarios «solo para reponer el gasto propio del organismo». Como comentó, «no hay que esperar a tener sed para tener que beber», sino que es necesario a lo largo de la jornada, de manera preventiva, para evitar problemas de salud, recomendando incluso realizar tomas como si fueran medicina, con una botella de 33 centilitros con cada una de las comidas. «Hay que tener siempre a mano una botella o una cantimplora, porque, si no lo tengo a mano, no me voy a acordar de tomarla», apuntó.

El Festival 60+Activos, que organiza El Norte de Castilla, está patrocinado por el Ayuntamiento de Valladolid, Aquavall, Recoletas Red Hospitalaria, Ballesol, Multiservicios Aguado, el Colegio de Ópticos-Optimetristas de Castilla y León y Dentalios, y cuenta con MediaMarkt Business como socio tecnológico y con la participación de Aprende a Vivir, Msoluciona, Sonrisalud, Audika, Clínica Baviera, AVAV, JBR Inmobiliaria, Clínica Villa del Prado, ADELPRISECYL, Adeslas y Mapfre.

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