
Secciones
Servicios
Destacamos
V. V.
Domingo, 16 de febrero 2014, 13:41
Diciembre de 1951. A orillas del Pisuerga llegaban los ecos de una noticia que se fraguaba a 7.500 kilómetros de distancia, a orillas del río Bimbiles, en Guinea Ecuatorial. La acción colonizadora española se extiende hacia el interior del país y un grupo de españoles decide bautizar el poblado de Añisok con el nombre de la ciudad natal de uno de sus integrantes, Basilio Sanz.
Es así como una pequeña parroquia y una escuela, levantada por misioneros españoles a finales de los años 20, pasó a convertirse, años después, en Valladolid de los Bimbiles, una ciudad en la que se trazaron calles, plazas y, sobre todo, carreteras de acceso para que los camiones penetraran en las zonas de producción de la yuca, el cacao o el café. Terminada la época colonial, Valladolid de los Bimbiles recobró, en 1969, su nombre anterior, Añisok. Hoy, sus responsables municipales han querido echar mano de su «pasado sentimental» y quieren estrechar lazos con la ciudad con la que, durante unos años, compartieron nombre.
El alcalde de Añisok, Cristóbal Nze Nfumu, ha enviado al Ayuntamiento de Valladolid una misiva en la que muestra su interés por iniciar los pasos para un hermanamiento o diversos programas de intercambio cultural entre ambos núcleos. «Hay grupos de música tradicional, de cursos de animación, orquestas, cantantes...», apunta el regidor guineano, quien explica que una de sus principales aspiraciones es conseguir una cooperación con la Universidad que permita a jóvenes guineanos estudiar en la UVA. Formada por varios núcleos de población («aquí los llamamos 'concejos de poblados'), Añisol destaca por su potencial agrícola, «con grandes plantaciones de plátano, cacao, café, tomates, yuca o maíz», como apunta por teléfono el alcalde de esta localidad.
El objetivo es recuperar una «amistad» que ya enlazó a ambas ciudades hace medio siglo. La hemeroteca de El Norte de Castilla da buena cuenta de esta relación. El 29 de abril de 1954, el periódico publicaba una breve reseña en la que se informaba de un telegrama enviado por el gobernador de Guinea. En apenas unas palabras, se agradecía al Ayuntamiento de Valladolid el envío de los planos y fotografías de Fuente Dorada para elaborar allí, en Guinea, una réplica del monumento pucelano. Y esa fuente llegó a construirse en la plaza principal de Valladolid de los Bimbiles... Desgraciadamente ya no existe, puesto que la fuente se destruyó en 1978, en la conflictiva época entre Macías y Teodoro Obiang.
La Diputación ha colaborado en varios proyectos de cooperación al desarrollo desarrollados en esta ciudad, como un programa de microempresas de producción agrícola.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Recomendaciones para ti
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.