El autor del atraco del siglo en Valladolid pide su liberación

Su nombre, Rolando Cancela Veiga, acaba de colarse casi de tapadillo entre los de los terroristas, asesinos y violadores que en las últimas semanas cuentan con los dedos de una mano los días que les restan en prisión. En su haber, sin embargo, no figuran delitos de sangre, pero resulta que la aplicación de la doctrina Parot pura y dura en el caso de este recluso de origen gallego y de 48 años prolongaría su estancia entre rejas hasta 2054, nada menos. La alternativa, aún si se anula, podría retenerle otros seis años más. Su abogado acaba de pedir un nuevo cálculo de las redenciones y, de paso, su excarcelación inmediata.

El protagonista es un delincuente común que lleva en la cárcel desde el 27 de enero de 1994. Fecha de su detención como autor del considerado en su día como el 'atraco del siglo' en la capital vallisoletana. Ocurrió un 7 de abril de 1993, cuando este atracador multirreincidente asaltó a mano más que armada un furgón de Prosegur en la primera planta del aparcamiento de El Corte Inglés del Paseo de Zorrilla. Él y sus cuatro compinches huyeron con 27,6 millones de pesetas contantes y sonantes (165.879 euros), una cantidad más que suculenta aún a día de hoy, sobre todo, si se tiene en cuenta que el botín nunca fue recuperado.

Rolando Cancela Veiga, entonces de tan solo 23 años, fue el cerebro de aquella operación, planificada al milímetro durante meses y que llevaron a cabo a las 21:30 horas de aquel miércoles (7 de abril) de 1993.

Los cinco asaltantes todos ellos detenidos durante los diez meses siguientes secuestraron inicialmente a un conductor en la Farola, le maniataron y le metieron en el maletero de su propio coche para, con él aún metido en el interior, emprender la huida una vez perpetrado el asalto.

El robo, entre tanto, tuvo lugar en la rampa del primer sótano del centro comercial. Los autores bloquearon el paso al furgón, que salía cargado con la recaudación, con otro coche robado mientras dos de ellos encañonaban y abrían fuego uno de ellos portaba un bazuca de fabricación casera contra el conductor al grito de que eran los Grapo, un grupo muy activo en esa época, pero que nada tuvo que ver con aquello.

Nadie, pese a todo, salió herido de gravedad un guarda jurado resultó herido leve, pero los asaltantes lograron acceder al vehículo blindado, cogieron las sacas con el botín (27,6 millones de pesetas en efectivo) y huyeron en el segundo vehículo, que luego abandonaron en la calle Leopoldo de Castro (cerca de la Feria de Muestras), con su propietario ileso, para huir definitivamente.

Una condena de 36 años

La banda llegó a planificar semanas después un segundo asalto al entonces Continente (el Carrefour del estadio), pero la Policía Nacional abortó sus plantes y los cinco autores fueron detenidos. Rolando, el cabecilla, y sus compinches se sentaron en el banquillo en 1998. A él le cayó la mayor sentencia dictada jamás contra un atracador en la provincia al sumar 36 años de prisión sus compañeros fueron condenados a penas de entre tres y veinte años.

Pero el cabecilla de la 'banda del furgón', como fue bautizada en la época, atesoraba un sinfín de antecedentes anteriores en su Galicia natal e, incluso, llegó a estar implicado en el asesinato de dos narcos gallegos, ya que el arma que utilizó en el atraco de El Corte Inglés fue la utilizada para ejecutar a dos traficantes en un pueblo pontevedrés a finales de 1992 todos los sospechosos de aquel crimen fueron absueltos después por falta de pruebas.

Entre unos y otros delitos, Rolando Cancela continúa hoy en prisión.