Fallece Pablo Castaño, párroco de Sobradillo de Palomares

Pablo Castaño Castaño, párroco de Sobradillo de Palomares y encargado también de las parroquias sayaguesas de Mogátar-Maniles, Las Enillas y La Tuda, ha fallecido en Zamora a los 74 años y tras 50 años de ministerio.

Castaño nació en Cerezal de Aliste en 1936, estudió en los Padres Mercedarios de Reus, Teruel y Valencia, y tras su ordenación presbiteral en 1960 desempeñó diversas funciones, principalmente la capellanía y la atención pastoral de las prisiones, tanto en España como Iberoamérica.

Se incorporó a la Diócesis de Zamora en 1989, donde se hizo cargo de las parroquias de Almendra, El Campillo (San Pedro de la Nave) y Valdeperdices, y fue notario del Tribunal Eclesiástico desde 1993 hasta 1995.

Se incardinó en la Diócesis en julio de 1995, y entonces fue trasladado a Sayago, donde fue nombrado párroco de Fariza y encargado de Badilla, Cozcurrita y Mámoles y en 1997 se le encargó también la atención de Moralina

En la Diócesis también se dedicó a la pastoral de prisiones, siendo nombrado en 1995 capellán del Centro Penitenciario de Topas, y pasando el año siguiente al Centro Penitenciario de Topas (Salamanca), donde fue segundo capellán.

En 2001 fue nombrado párroco de Sobradillo de Palomares, y encargado de Mogátar-Maniles, Piñuel y Torrefrades.

En 2002 se le añadió la parroquia de Moraleja de Sayago, cesando en Piñuel. En 2004 cesó como encargado de Moraleja, y en 2005 fue nombrado encargado también de Pueblica de Campeán y Tardobispo, cesando unos años después en estas dos localidades y en Torrefrades.

Por último, en 2009 fue nombrado cura encargado de Las Enillas y La Tuda. Junto a sus labores parroquiales, era también responsable diocesano para catalogar los bienes inmuebles, cargo al que se dedicaba desde su nombramiento en 2003.

El pasado mes de agosto Pablo Castaño fue homenajeado en su pueblo natal con motivo de sus Bodas de Oro sacerdotales, en el marco de las fiestas patronales de los santos Justo y Pastor.