La nieve corta el paso de trenes de media distancia entre la Meseta y el Norte
Renfe amplía hasta hoy el plan de transbordos en Valladolid para los viajeros de los Alvia entre Madrid y la Cornisa Cantábrica
EL NORTE
Domingo, 10 de enero 2010, 11:07
El temporal de frío y nieve no sólo complica la circulación de los vehículos por las carreteras de la red principal y secundaria, sino que las intensas nevadas caídas sobre la Península también han puesto en un brete el tráfico ferroviario por España. Ayer por la mañana, Renfe se vio obligada a interrumpir la circulación de los trenes de media distancia que comunican Castilla y León con la costa Norte. No pudieron circular hasta una veintena de convoyes.
La nieve cortó los servicios ferroviarios de media distancia que unen León con Pola de Lena, en Asturias; Palencia con Reinosa, en Santander; y Burgos y Miranda de Ebro con Vitoria, en el País Vasco. En la estación de Vitoria también se vieron interrumpidos los trenes con Irún, en Guipúzcoa, y Pamplona, en Navarra.
La circulación de los trenes de largo recorrido entre Madrid y la costa Norte se mantenía ayer. Sin embargo, ante la insistencia del temporal y las previsiones de que se recrudezcan las bajas temperaturas (se alcanzarán hasta -20 grados en algunos puntos de la cornisa Cantábrica, según la Agencia Estatal de Meteorología), Renfe ha decidido extender hasta hoy, domingo 10 de enero, el plan especial de transbordos en la estación Campo Grande de Valladolid para todos los pasajeros de los trenes Alvia de ancho variable que enlazan Madrid con Asturias, Cantabria y el País Vasco, en ambas direcciones. Renfe calculaba que hoy se verán afectados por el transbordo otros 18 trenes. Por lo tanto, entre unas 4.500 y 5.400 personas, dependiendo de si circulan con una media de 250 pasajeros o si van llenos (300).
De esta manera, los viajeros de los Alvia, procedan del norte o de Madrid, se ven obligados a descender en Valladolid con sus equipajes para subirse a otro convoy preparado que continua la marcha hacia el destino establecido. Renfe se ha visto obligado a recurrir a los transbordos debido a que la presencia de hielo y nieve en los rodales de los convoyes impide modificar el ancho de vía de forma automática en el intercambiador.
En cuanto a la circulación por la red viaria, siete puertos de montaña y cinco carreteras de Castilla y León permanecían cerrados anoche como consecuencia de las condiciones climatológicas, mientras que en otros 14 puertos se precisaba del uso de cadenas y otras 60 vías de distinta titularidad estaban afectadas por la presencia de nieve y hielo, según los datos ofrecidos por la Dirección General de Tráfico (DGT) y recogidos por Europa Press. Al cierre de esta edición, el paso para vehículos continuaba restringido en la A-67 en el puerto de Pozazal, entre Palencia y Cantabria, y en la N-630 en el puerto leonés de Pajares.
Hacia las dos de la tarde de ayer se restableció la circulación en la AP-66, la autopista que conecta Castilla y León con el Principado de Asturias, que había sido cortada primero a la circulación de camiones y desde las 23.15 horas del viernes para todos los vehículos. Los 137 camiones que permanecían estacionados desde el viernes por la noche pudieron retomar la circulación en ambos sentidos de la AP-66, lo mismo que los cerca de 80 vehículos pesados embolsados en la localidad palentina de Aguilar de Campoo que transitaban por la A-67, la Autovía de la Meseta. Durante el sábado también pudieron circular los camiones retenidos al norte de la capital de Burgos y los parados en la N-111, a su paso por la provincia de Soria.
Sin embargo, fuentes del Centro de Gestión del Tráfico confirmaron a Europa Press que se mantenían las restricciones para la circulación de camiones en la A-67, en el puerto de Pozazal, ubicado entre la provincia de Palencia y la comunidad de Cantabria, y en la N-630 en el puerto leonés de Pajares.
Anoche también permanecía cerrado el puerto burgalés de Bocos en la CL-629; los leoneses de Monteviejo en Besande, Señales en Puebla de Lillo, La Magdalena en Riello, Vegarada en Vecilla de Curueño y Somiedo en Villablino y el palentino de Vañes, en la CL-627. Asimismo se precisaba del uso de cadenas para circular por los puertos de Arija, La Mazorra, La Sía, Lunada, Estacas de Trueba, Manquillo y La Magdalena, todos ellos ubicados en la provincia burgalesa; así como por los leoneses de Pajares, San Glorio, Pontón, San Isidro, La Magdalena, Tarna y Pando.
En cuanto a las carreteras, la presencia de nieve y hielo en la calzada obligó a interrumpir la circulación en cinco vías: la AV-932 en Piedrahíta (Ávila); la LE-473 en Aralla de Luna, la LE-315 en Piedrafita y la LE-481 en Torrebarrio, todas ellas en la provincia de León, así como en la CL-627 en Cervera de Pisuerga (Palencia). Además, alrededor de 60 carreteras de la comunidad autónoma, excepto de las provincial las de Zamora y Valladolid, presentaban dificultades debido a la presencia de nieve, hielo y lluvia.
Por otro lado, El delegado del Gobierno en Castilla y León, Miguel Alejo, visitó ayer por la mañana el Centro de Conservación y Mantenimiento de Carreteras de León, ubicado en Onzonilla, para supervisar el Operativo de Viabilidad Invernal en la Red de Carreteras del Estado en Castilla y León.
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.