La Policía detiene al 'violador de la capucha' después de dos agresiones más

Le seguían la pista desde hace ocho meses y al final la Policía le ha detenido después de intentar dos agresiones sexuales más coincidiendo con las fiestas de la Virgen de San Lorenzo. El presunto 'violador de la capucha' fue detenido este miércoles por la mañana por funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía, cuya captura se había convertido en objetivo prioritario en la Comisaría Provincial, ya que lejos de parar el agresor seguía actuando contra chicas con edades comprendidas entre los 18 y 22 años.

Se trata de José Antonio V. M. un joven de 19 años nacido en Soria y con un historial por delitos similares que comenzó en su adolescencia. La detención del presunto 'violador de la capucha' se ha producido en una empresa de servicios donde trabajaba como jardinero.

Según indicaron fuentes consultadas, José Antonio V. M,. había estado ingresado en el centro de Menores Zambrana hasta el pasado año, momento en el que cumplió los 18 años y salió.

Sin embargo, el hecho de que hubiera tenido antecedentes por agresión tramitados desde las Fiscalías de Menores de provincias como Soria, León o Valladolid no supone que la Policía tenga registrados en sus archivos estos datos, lo que ha dificultado más aún la identificación del autor.

La Policía le imputa un total de nueve agresiones sexuales conocidas, que pudieran ser más si alguna de sus víctimas no se decidió a denunciar. Todas ellas -tres violaciones y seis agresiones sexuales- se han cometido en La Rondilla, Huerta del Rey y Barrio España. La primera de las agresiones se cometió el 20 de febrero cuando una mujer denunció en dependencias policiales el hecho ocurrido en un garaje de su domicilio. Según la denuncia, el autor entró en el portal y la intimidó con una navaja, y bajo amenazas la llevó al sótano donde consumó la agresión. Una semana después, la Policía tuvo constancia de que un individuo de similares características físicas (de 1,70 metros) había actuado en otra calle de la capital, si bien en esta ocasión no llegó a cometer la acción ya que la joven logró entrar en el portal dejando al 'violador de la capucha' fuera. En ese momento, el joven llevaba un pasamontañas con el que trataba de ocultar sus rasgos.

El seguimiento policial que se estableció en febrero logró evitar que el agresor volviera a actuar hasta que en la madrugada del 12 de abril consumó una tercera agresión en la calle Mieses, en Huerta del Rey. En este caso empleó un objeto punzante para amenazar a la chica y le obligó a acompañarla hasta un parque.

Ese mismo mes, el violador fue protagonista de otra agresión contra una joven que se disponía a entrar en su portal. También con pasamontañas, le obligó a punta de navaja a bajar al garaje de la finca para continuación agredirla sexualmente.

La investigación policial lejos de pararse no sólo prosiguió con la obtención por parte de la Policía Científica de restos biológicos durante todos estos actos, que han de servir como prueba para formalizar la acusación contra el joven, sino que se amplió en colaboración con la Policía Municipal de Valladolid el radio de seguimiento con policías de paisano y de servicio por las noches cuando solía actuar. De hecho, varias de las agresiones se cometieron en días de ocio y con fiestas como Semana Santa o de la Virgen de San Lorenzo, donde aprovechó para seguir a sus víctimas hasta casa.

Cámara y herida en mano

Para la detención de este presunto agresor han sido determinantes dos circunstancias. Por un lado, la identificación por medio de una cámara de vigilancia que se hizo en una de las agresiones. Y en segundo lugar, el hecho de que el pasado fin de semana José Antonio V. M. intentase cometer dos agresiones más en una de las cuales su víctima logró zafarse no sin antes morderle en una mano, lo que ha dejado una herida visible que se comprobó cuando se le detuvo esta semana.

Durante la investigación policial, los agentes siguieron los posibles pasos antes y después de que cometieran los actos, lo que permitió localizar algún establecimiento con cámaras en las que aparecía el presunto autor, aunque si bien la grabación de las imágenes captadas no permitía identificar plenamente al individuo que aparecía en ellas.

Según el Ministerio del Interior, a través de la Comisaría de Valladolid, las dos últimas agresiones ocurridas la semana pasada volvieron a confirmar que se trataba de un joven, por lo que se investigó en las zonas de ocio juvenil. Hasta que la última de sus víctimas fue abordada en el portal de su casa, y cuando el 'violador de la capucha' intentó taparle la boca, la chica le mordió en la mano dejándole una pequeña herida.

Fue entonces cuando se montó un dispositivo policial para incrementar las identificaciones de jóvenes que respondían a esas características físicas denunciadas. Una patrulla del Grupo de Motos identificó a un joven que respondía a estas señas y se facilitaron los datos al grupo encargado de la investigación, quien estableció vigilancia en torno al domicilio de José Antonio V. M., que coincide con la zona donde cometía los delitos. En el seguimiento realizado estos últimos días se comprobó que tenía una herida en la mano, y que sus rasgos físicos podían corresponder a los del joven que aparecía en una de las grabaciones de vídeo el día de una agresión. Tras detenerle se realizó un registro en su casa, en la que se encontraron prendas que han sido identificadas por las víctimas. El detenido pasará hoy a disposición judicial.