ISABEL F. BARBADILLO
Domingo, 25 de enero 2009, 02:14
Publicidad
Lleva año y medio en el cargo. Su trayectoria política es corta, pero en alza. Fue concejala del Ayuntamiento de Ávila y sólo un mes procuradora en las Cortes. Juan Vicente Herrera la nombró directora general de la Mujer «como recompensa al trabajo bien hecho». Aceptó el reto encantada. Aporta, según dice ella misma, el valor añadido de la formación, la juventud y la ilusión. El pasado congreso regional del PP la eligió vicesecretaria de Relaciones Sociales. Con 38 años y tres hijas, esta economista abulense lucha para que un día su área deje de existir, cuando la igualdad entre hombres y mujeres sea una realidad incuestionable y la violencia doméstica, una lacra para el recuerdo.
-¿Por qué aceptó ser directora general de la Mujer?
-Me pareció un reto muy interesante. Creo en las políticas activas de mujer y poder implicarme directamente en lo que es la igualdad de oportunidades de mujeres y hombres y en la lucha y erradicación de la violencia de género era también un reto personal.
-¿Cómo está la situación en Castilla y León?
-Se ha avanzado mucho en la comunidad y en España en los últimos años, pero aún queda mucho por hacer. Castilla y León ha sido pionera en muchos programas. Tuvo la primera Ley de Igualdad de Oportunidades entre mujeres y hombres de toda España en el año 2003, vamos ya por el cuarto Plan de Igualdad, tenemos el segundo Plan contra la Violencia de Género y existen desde hace años la Comisión Regional de la Mujer y la Comisión contra la Violencia de Género. Castilla y León ha asumido un firme compromiso con las políticas de igualdad.
-A pesar de esos programas pioneros, en el 2008 murieron seis mujeres víctimas de malos tratos, cifra que sitúa a la comunidad en el cuarto puesto nacional, en términos relativos. ¿Es que no calan esas políticas?
Publicidad
-El número de 70 fallecimientos en España y 6 en Castilla y León es dramático. Creo que la ley orgánica de medidas de protección aprobada en el 2004 para luchar contra la violencia de género tiene partes positivas y negativas. Ha ayudado a incrementar las denuncias y a que las autonomías, que son las que tienen competencias, reactiven sus actuaciones. Pero hay una parte negativa y difícil de resolver por parte de todas las administraciones y es el número de fallecimientos, que lamentablemente no han descendido desde el 2004. La parte de protección a las mujeres es competencia del Gobierno central. Nosotros exigimos más medidas de protección, más policías, sobre todo en los niveles de riesgo, y que los sistemas telemáticos sean más seguros.
Casas de acogida
-Las 19 casas de acogida de la Junta están en torno al 50% de ocupación. ¿Cómo interpreta el dato?
-La comunidad es extensa y tenemos que tener casas en todas las provincias, aunque cuatro son centros de emergencia que funcionan las 24 horas del día. Si el índice de ocupación está en el 50% es porque nos vemos obligados a tener recursos. Algunas mujeres prefieren permanecer en su provincia y evitar los desplazamientos.
Publicidad
-¿Y después de estar una temporada en la fase de acogida, qué?
-Tenemos un programa de inserción laboral. Subvencionamos a las empresas desde 2.500 euros a 6.000 para que contraten a mujeres víctimas de la violencia de género. Hacemos jornadas de formación subsidiada para las víctimas. Es fundamental que estas mujeres puedan trabajar. Nos esforzamos en implicar a las empresas. Cuando salen de las casas de acogida también puedan optar a unas ayudas de la Junta para fomentar la autonomía de los primeros meses y está la ayuda del Gobierno, de la Ley Integral.
-¿Tienen las mujeres del medio rural más dificultades?
-Están más condicionadas a la hora de denunciar por las presiones familiares y el entorno. Pero hemos formado a 800 agentes, con sanitarios de las zonas, concejales, gente de los CEAS, para que puedan detectar situaciones de malos tratos y educar en igualdad. También hemos puesto en marcha un centro móvil de igualdad que recorre las provincias para informar al público en general y, sobre todo a los jóvenes.
Publicidad
-¿Los niños son las víctimas olvidadas de los malos tratos?
-En el congreso nacional 'Menores como víctimas de la violencia de género' que celebramos en Ávila, en noviembre, se llegó a una conclusión contundente: que los menores son tan víctimas como las mujeres. La atención psicológica es imprescindible para evitar que los niños reproduzcan la conducta de los agresores y las niñas sean posibles mujeres sumisas. En el anteproyecto de ley contra la violencia de género damos un nuevo paso y ampliamos los recursos a los mayores. Hay casos en que las mujeres no denuncian porque tienen mayores a su cargo.
-Una visita a una casa de acogida será una experiencia dura.
-Sí, y lo que más me ha llegado al corazón, como persona, son los niños, sus ojos, su mirada. Reflejan un gran sufrimiento. Son miradas con miedo. Pero también te encuentras a una mujer en la mesa de su habitación estudiando para presentarse a ofertas de trabajo. Lo más positivo es que muchas mujeres consiguen salir de esta espiral que es la violencia de género, y algunas participan después en nuestros programas de sensibilización.
Publicidad
-También ofrecen terapias a los maltratadores.
-Hemos sido pioneros en este programa que luego han adoptado otras comunidades. Hubo sectores que decían que el dinero debía destinarse sólo a las mujeres. Pero estamos invirtiendo en actuaciones con agresores en beneficio de las mujeres, para que dejen de ser maltratadas ellas, o las futuras parejas de sus agresores.
Líderes en Europa
-El presidente Herrera ha mostrado sensibilidad en la lucha contra el maltrato y quiere implicar a los países de la UE. ¿Servirá de algo el dictamen que han respaldado esta semana las autonomías y en el que usted coordina los trabajos?
Noticia Patrocinada
-Creo que va a servir. Cuando el Pleno del Comité de las Regiones lo apruebe en octubre -Herrera es el ponente- queremos que se refleje en actuaciones concretas. Se harán diagnósticos comunes, se propondrán sistemas de sensibilización, prevención, asistencia. Es un paso más para que la Comisión Europa se implique y empiece a funcionar el Instituto Europeo de Igualdad.
-Usted es un valor político en alza. Es también vicesecretaria de Relaciones Sociales del PP regional.
-Me agradó mucho el nombramiento de Juan Vicente Herrera, es una responsabilidad más.
Publicidad
-¿Se considera mujer cuota?
-¡Para nada! Cuando el presidente me llamó para contar conmigo, me dijo: 'Es una recompensa al trabajo bien hecho'. Poseo mi valor añadido al tener formación, haber trabajado en la empresa privada. Por mi trayectoria, más modesta o no, profesional y política, no me siento cuota.
-¿Violencia de género, machista, sexista o doméstica?
-El concepto de violencia de género, es más amplio. No podemos reducirla al ámbito familiar porque la violencia puede ejercerse también en el laboral o en el sexual.
Publicidad
-¿Qué opina de las declaraciones del alcalde de Villalón, que no dejaban en buen lugar a la mujer?
-Muy inapropiadas, fuera de contexto y desconcertantes, por lo menos para mí como mujer.
-Si se trata de mentalizar a los hombres en la igualdad, ¿no debería existir una Dirección del Hombre?
-(Risas). Cuando tomé posesión de mi cargo, los periodistas me preguntaban cuál era mi objetivo. Respondí que la Dirección de la Mujer deje de existir porque no sea necesario luchar por la igualdad. El objetivo es que no haya ni Dirección de la Mujer ni Dirección del Hombre porque entonces se habrá conseguido el equilibrio.
0,99€ primer mes
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.