El precio del alojamiento estudiantil en Zamora sube a 450 euros al mes

MIGUEL ÁNGEL MATILLA La opción más socorrida para abaratar costes es compartir piso con otros estudiantes, de manera que el coste medio de una habitación individual es de 130 euros al mes. El SOU prevé un aumento de la oferta y la demanda de alojamiento para estudiantes para el próximo curso académico, «ya que ahora mismo hay más movimiento que otros años en esas fechas, cuando la entrada de oferta y la solicitud por parte de los demandantes es mayor», explican desde este servicio. Hace dos años, el precio medio mensual de los pisos en alquiler era, aproximadamente, de 400 euros, por lo que se evidencia un destacado aumento que, paradójicamente, no es ajeno a la psicosis de crisis económica. Las residencias también han subidos los precios, aunque el incremento ha sido inferior al que han experimentado los pisos de particulares, que tienen en cuenta las ayudas que reciben los jóvenes de las administraciones públicas para alquiler de vivienda. En el año 2006, el precio medio de las residencias San Alfonso, Doña Urraca, Misioneras de la Providencia y Fernando III oscilaba entre los 300 y los 500 euros, mientras que en la actualidad se sitúa entre los 350 y 550 euros. Continúan siendo mucho más caras que los pisos, pues los particulares ofrecen la posibilidad de compartir habitaciones, con lo que el precio medio de las habitaciones en alquiler es de 130 euros, un precio asequible si se compara con el caso de Salamanca. Los estudiantes que alquilan su vivienda en Zamora proceden, en su mayoría, de Salamanca, y cursan estudios en la Escuela Politécnica, en la Escuela de Enfermería, en la Escuela Universitaria de Magisterio, o módulos. Aquellos que inician sus estudios prefieren, normalmente, alojarse en residencias, debido a que son los más jóvenes y sus padres se quedan más tranquilos si el primer año sus hijos se instalan en este tipo de alojamiento. En cuanto a las zonas más demandadas, depende de la cercanía del centro de estudios, la mayor parte de la demanda pide un alojamiento cercano al campus. A pesar de ello, Bote señala que «sale más barato ir y venir en autobús que alojarse en Zamora pero, aún así, los estudiantes salmantinos preferimos quedarnos cerca de nuestro centro de estudios para no perder tiempo». Recuerda que «hace cuatro o cinco años sólo pagaba 107 euros al mes». Con respecto a vivir en un piso o en una residencia, Bote lo tiene claro: «las residencias son mucho más caras y, por lo que he visto, tampoco ofrecen muchas más comodidades que un piso. Hablando de costes, vivir en Zamora en alquiler no me parece caro, yo estoy contento». El precio de los pisos en alquiler depende de las condiciones que ofrece, del estado en el que se encuentra y de su ubicación. Los más baratos cuestan alrededor de 300 euros, siendo Los Bloques el barrio más demandado ya que, al no ser una zona céntrica, ofrece precios muy asequibles y se encuentra junto al campus. Los pisos del centro son los más caros, superando los 600 euros; el aumento del precio depende también de la superficie y del equipamiento que se ofrece, sobre todo, el tipo de calefacción. El precio medio en las residencias es de 470 euros. En tres de ellas, los clientes pueden elegir entre habitaciones individuales o compartidas. El coste medio de las primeras es de 500 euros y, el de las compartidas, de 400 euros. Las dos que más estudiantes reciben son Doña Urraca y San Alfonso. Ambas tienen una capacidad de más de 100 plazas y en los últimos años siempre han estado al completo. El 30% de los estudiantes se van después de dos años a vivir a pisos compartidos para ganar en independencia.