Las llamas obligan a evacuar a más de cien vecinos de un pueblo de Segovia

Las llamas irrumpieron de repente en la provincia segoviana. Devastadoras. El fuego arrasó un número incalculable de hectáreas. La densidad del humo y el fuerte viento cambiante impidieron que los técnicos del Centro de Coordinación Operativa del Infocal pudieran hacer siquiera un cálculo de la superficie arrasada. Lo peor es que, a última hora de ayer, el incendio continuaba activo y escapando al control del operativo de 150 personas que desde la una de la tarde trabajaron a destajo para su extinción.

La última decisión de una jornada tensa fue la adoptada por el Centro Provincial de Mando de la Delegación Territorial de la Junta en Segovia, que a primera hora de la noche de ayer optó por la evacuación preventiva de la población de Moral de Hornuez, pueblo situado a unos 98 kilómetros de la capital segoviana.

La amenaza del fuego, y sobre todo del humo, obligó a realojar durante esta noche pasada a más de un centenar de vecinos y veraneantes de la zona en el polideportivo y albergue de Boceguillas. Protección Civil fletó varios autocares para trasladar a los afectados.

La evacuación fue ordenada 'in situ' por los efectivos de la Guardia Civil y acordada con los alcaldes de ambas localidades.

Ése fue el desenlace provisional de una jornada trepidante y nerviosa marcada por el humo, el viento y el fuego.

Todo comenzó hacia la una de la tarde con el aviso dado por la torreta de vigilancia de Pradales, desde donde se divisó la primera columna de humo procedente del entorno de Honrubia de la Cuesta, uno de los últimos pueblos de la provincia antes de traspasar a territorio burgalés y situado a veinte kilómetros de Moral de Hornuez.

Se trata de un enclave plagado de pequeños núcleos muy próximos unos de los otros, como Campo de San Pedro y Maderuelo al este, Cilleruelo de San Mamés y Cedillo de la Torre al sur, Pradales al oeste y Villaverde de Montejo y Valdevacas de Montejo al norte. La dirección de los vientos dominantes ocasionaron que una columna de humo se dirigiera hacia Moral de Hornuez, y para evitar problemas a la población, se procedió a su evacuación. Se trata de una zona donde suele soplar el viento con intensidad y frecuencia. Prueba de ello son los numerosos molinos de energía eólica que se encontraban próximos a las llamas.

150 personas

El incendio obligó a movilizar a un gran número de efectivos, entre ellos cuatro aviones, nueve helicópteros y un operativo de más de 150 personas procedentes de varias provincias.

El riesgo del fuego fue catalogado en un nivel 2, en una escala de 0 a 3. En las tareas de control intervinieron dos aviones de carga en tierra procedentes de valladolid y Soria, junto a otros dos aviones anfibio del Ministerio de Medio Ambiente con base en Salamanca.

Igualmente, participaron nueve helicópteros, dos con base en la provincia de Segovia, otros dos procedentes de Ávila, uno de Valladolid, uno de coordinación, otros dos del Ministerio y uno de Protección Civil.

Pero la llegada de la noche, con las llamas aún sin sofocar, obligó a retirar los medios aéreos. Hasta el amanecer continuaron trabajando los retenes que se mantienen en todo el perímetro y, en las zonas en las que ya se ha extinguido el incendio, para que el fuego no avance de nuevo a esos lugares.

A última hora del día de ayer, la autopista A-I (Madrid-Burgos) -que se mantuvo cortada a lo largo de unos tres kilómetros durante buena parte de la tarde- se abrió al tráfico, aunque el nivel 2 de gravedad continuaba activado por el riesgo que supone el incendio.