Borrar
Los trabajadores afectados por los impagos se manifiestan ayer en la plaza de Inés de Osorio. / J. RUIZ
PALENCIA

Dos meses sin cobrar

Diecisiete inmigrantes deambulan por las calles y los organismos en busca de ayuda para que una constructora les pague las nóminas

ISABEL CALLE

Miércoles, 11 de junio 2008, 05:02

La crisis económica muestra estos días su cara más dura en todo el país: la huelga de los transportistas justificando los paros porque con el valor del gasóleo no les llega para comer, y los paros de los taxistas que se lamentan de que al precio que está la gasolina no pueden llenar el depósito.

Entre tanta consigna, la calle está muy movida y ayer aún se apreciaba más en Palencia, donde diecisiete trabajadores inmigrantes -portugueses y marroquíes- deambulaban por las calles y por algunos organismos oficiales en busca de ayuda para poder cobrar las dos nóminas que les adeuda la subcontrata Tecnomad, que ejecuta la urbanización El Balcón de Castilla, en Autilla del Pino.

Desde primeras horas de la mañana, los trabajadores inmigrantes se concentraron ante las instalaciones de la promotora El Pilar de Lantadilla, también conocida como Innova Futuro, que ha subcontratado las obras a Tecnomad, a la espera de que alguno de sus responsables se pasara por las instalaciones. «En total, la empresa Tecnomad nos debe 63.000 euros», cuantificó el portugués Marco Silva, erigido en portavoz del grupo, ya que chapurrea el castellano y sabe relatar con pelos y señales que han trabajado a destajo de lunes a sábado y que ahora se encuentran con que se les debe dos meses de la nómina del contrato por obra firmado con la subcontrata.

El dinero lo necesitan para poder comer y seguir viviendo en los pisos de alquiler que han de pagar puntualmente si no quieren quedarse en la calle. Una parte de ese sueldo que deberían haber cobrado el pasado día 5 también lo esperan con impaciencia sus familias en sus países de origen para poder subsistir. El dinero que les deben también es la garantía para mantenerse en pie, después de las duras jornadas que han soportado, ya que después de sesenta días no quedan remanentes para comprar comida. «No nos dejan entrar en la obra», prosigue Marco Silva, recordando que no es la primera vez que han sufrido una experiencia semejante, por lo que ahora temen que no puedan percibir todo lo pactado, como las horas extraordinarias. «Hace tres meses nos pasó algo parecido y se resolvió, pero ahora tenemos miedo de quedarnos sin nuestro sueldo», manifiestan otros igual de descorazonados, al tiempo que acusan a los responsables de la subcontrata de «haber desaparecido». El grupo deambuló ayer en busca de apoyo oficial a un problema laboral que puede adquirir tintes humanitarios y hoy lo seguirá intentando en los despachos de la Oficina de Trabajo y la Subdelegación del Gobierno.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elnortedecastilla Dos meses sin cobrar

Dos meses sin cobrar