La residencia para enfermos mentales de Intras contará con 42 plazas

La Fundación Intras pondrá en marcha durante el segundo semestre del año la residencia pionera para personas discapacitadas que padecen una enfermedad mental grave y prolongada, que finalmente contará con 42 plazas.

La directora técnica de Intras, Teresa Orihuela, explicó que la fecha de apertura de este centro, el primero de estas características en Castilla y León, dependerá de que se determine el modelo de funcionamiento y gestión de la residencia. Además, señaló que las obras de construcción del edificio, ubicado junto a la estación de autobuses de Toro, ya han concluido, mientras que la fase de equipamiento «está prácticamente terminada», por lo que sólo restaría fijar el modelo de funcionamiento de esta nueva residencia.

En este sentido, Orihuela indicó que las Consejerías de Sanidad y de Familia e Igualdad de Oportunidades están trabajando conjuntamente para poder definir, con la mayor brevedad posible, «ese modelo de gestión». Puntualizó la directora técnica de la Fundación Intras que para regular el funcionamiento de otro tipo de residencias, como las de ancianos, «existe una normativa clara, pero para ésta, que es la primera que va a empezar a funcionar en Castilla y León, existe un cierto vacío, por lo que es necesario definir muy bien el modelo de gestión y de funcionamiento».

Este centro residencial contará finalmente con 42 plazas para personas de 18 a 65 años, de ambos sexos, discapacitadas por enfermedad grave y prolongada en situación de dependencia, que carezcan de autonomía suficiente o apoyo familiar. En cuanto a las personas que ocuparán las 42 plazas de las que dispondrá este centro, Orihuela señaló que procederán de distintos puntos de Castilla y León y que se dará prioridad a aquellas que estén más necesitadas.

Según la directora técnica de Intras, «la idea es hacer una institución no demasiado regulada, sino que lo que se pretende es crear un hogar para las personas que van a vivir en la residencia y, en lo posible, a medida de sus necesidades y preferencias».

Alternativa

De hecho, con este centro se pretende ofrecer un servicio de alojamiento comunitario tutelado con los apoyos individualizados que precise cada residente y servir de alternativa al alojamiento familiar, favoreciendo el mantenimiento de los lazos sociales y familiares previos.

Además, el centro se plantea como una forma de alojamiento tutelado de orientación comunitaria, de tal forma que las actividades de integración se realizarán fuera de la residencia, ya que los residentes saldrán a centros de rehabilitación laboral. Todas las actividades terapéuticas se realizarán también fuera de estas instalaciones.

La creación de este centro residencial constituirá un primer paso para poder dar cobertura de alojamiento a un colectivo, el que integran discapacitados que padecen una enfermedad mental grave y prolongada y que, en la actualidad, tiene muchas dificultades para acceder al mismo.

Contratación

En cuanto a la contratación del personal que trabajará en la residencia que pronto se inaugurará en Toro, aseguró que aunque algunos puestos de trabajo ya han sido adjudicados, «por el momento estamos en la fase de recibir currículum para poder elegir al personal que trabajará en la residencia».

Esta residencia para enfermos mentales graves y prolongados ha sido subvencionada por la Junta de Castilla y León, que aprobó destinar más de 1,6 millones de euros para las obras de construcción de

este centro residencial en Toro, el primero de estas características que se pondrá en marcha en la comunidad autónoma