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Dicen que renovarse o morir y las monjas Dominicas que residen en el monasterio de Santo Domingo el Real de la capital segoviana se han aplicado el cuento. El progresivo e imparable descenso en las vocaciones les ha llevado a echar mano del cebo de las nuevas tecnologías con la voluntad de extender sus redes en el océano de Internet y captar nuevas novicias que garanticen el futuro de la congregación.

Las hermanas no han escatimado reclamos en su misión evangelizadora. Las dominicas han creado un blog, un cuaderno de bitácora en el que dan fe, y nunca mejor dicho, de su vocación y de su vida cotidiana en la clausura del convento situado en el número dos de la calle Capuchinos Alta de la capital del Acueducto, en pleno casco histórico.

El testimonio 'on line' de las monjas segovianas emplea prácticamente todas las armas publicitarias y promocionales de las que pueden disponer en el mundo cibernético con el fin de atraer a las futuras novicias.

Además de las reflexiones vocacionales, el blog ofrece un vídeo en el que una de las hermanas del monasterio de Santo Domingo el Real explica cómo recibió la llamada de Dios que le llevó a enfundarse el hábito y vivir una vida cimentada en la oración, en la penitencia y en el silencio. Un mutis que rompe en los casi dos minutos que dura la grabación.

'Testimonio de vocación: cómo y por qué me hice monja dominica' es el título de este vídeo que, como no podría ser de otro modo, está colgado en esa fábrica de éxitos cibernéticos y contenedor virtual que es YouTube.

Fotografías y consejos

Desde hace dos meses, una de las religiosas insta a los visitantes del blog a que conozcan la intimidad del monasterio a través de los mensajes que incorpora a la bitácora. 'Las monjas de mi convento, ¿no te animas?' es el nombre del último 'post'. En él, la religiosa impulsora de esta iniciativa incluye incluso dos fotografías en las que muestra a sus compañeras en el claustro del convento y en el jardín.

Este diario virtual también divulga la misión de las Dominicas y desvela los requisitos que hay que reunir para incorporarse a esta orden religiosa, así como a la vida contemplativa -«salud física, madurez psicológica proporcionada a la edad, recto juicio, carácter abierto e idoneidad para la vida comunitaria»-. El blog también contiene información y consejos para hacerse monja.

En la actualidad, sólo residen en el convento diez monjas. La madre priora apunta que hace tiempo eran treinta, pero la falta de vocaciones ha diezmado su número. Precisamente este año la orden celebra su Año Jubilar, y se cumplen 800 años de la fundación del primer monasterio de Madres Dominicas en la localidad francesa de Prulla.

La congregación ocupa el convento de Santo Domingo el Real desde 1513. Además de su incursión en las nuevas tecnologías, la dedicación principal de estas religiosas es la artesanía. De sus talleres salen reproducciones de piezas del Renacimiento español que después venden al público.