Borrar
Consulta la portada de El Norte de Castilla
Medina del Campo registró una importante afluencia de público durante toda la jornada.
La Feria Renacentista de Medina cuelga el cartel de completo en hoteles y restaurantes

La Feria Renacentista de Medina cuelga el cartel de completo en hoteles y restaurantes

La gran afluencia de público no ha evitado un descenso de ventas en el mercado respecto a ediciones anteriores

patricia gonzález

Lunes, 22 de agosto 2016, 12:09

Una gran afluencia de visitantes que, según la organización y a falta de cifras oficiales, habría superado a las cuatro anteriores ediciones Imperiales y Comuneros, pero menor volumen de ventas a juicio de una elevada parte de los comerciantes de las 250 paradas del mercado. Y es que la tan ansiada recuperación económica parece que todavía no ha llegado al bolsillo de los ciudadanos, que, eso sí, han respondido a la llamada de esta cita de forma muy notable, lo que consolida el evento como uno de los principales imanes turísticos de Medina del Campo.

A pesar de esta primera valoración realizada por algunos de los comerciantes del mercado, la realidad es que todos los hoteles del municipio colgaron el cartel de completo y muchos de los restaurantes y bares del casco histórico mostraron a media mañana de ayer su satisfacción al ver cómo, un año más, «hemos tenido un lleno y hemos trabajado muy bien, con una gran afluencia de público».

En las próximas semanas, la organización analizará los resultados y apuntará en la lista de asuntos pendientes para la próxima edición algunos pequeños detalles a mejorar. Ya en otoño se conocerán los resultados del estudio que la Universidad Europea Miguel de Cervantes ha estado elaborando durante estos días, donde ha encuestado a 900 personas para conocer, además del grado de satisfacción general de los visitantes, el gasto medio y el impacto económico.

Al igual que en otras ediciones, los puestos de alimentación y las tabernas distribuidas por las diferentes calles del mercado habrían sido los grandes beneficiados del consumo ciudadano. Una de las tabernas que más movimiento ha registrado durante toda la feria ha sido la comunera, ubicada en la calle Toledo. Desde este establecimiento aseguran que «nos ha ido regular tirando a bien. Todavía no hemos realizado las cuentas para saber el beneficio que hemos obtenido, pero tenemos que decir que el gasto tampoco ha sido elevadísimo».

Además de realizar esta valoración, en la taberna explican que «siempre han pagado con billetes pequeños, de cinco o de diez euros, y realmente pensamos que para el volumen de gente que ha habido el gasto medio no ha sido muy elevado». En este establecimiento, con precios asequibles, se han servido durante estos días cien kilos de carne y se han consumido ocho barriles de cerveza.

La que también ha servido cien kilos de carne durante la feria ha sido una de las tiendas de alimentación de la Plaza Mayor, que decidió participar de manera activa en el evento y poner una parada. «Nosotros, por el momento, bien; no tenemos queja, aunque sí hemos visto que lo mismo está un poco más flojo este año, pero el balance que realizamos es positivo», comentan. Además del pan para los bocadillos y para los clientes habituales, esta tienda también ha vendido barras para los restaurantes que se quedaron sin suministros debido al ritmo frenético de las jornadas del jueves, viernes, sábado y el domingo por la mañana.

A pesar de esta valoración, muchos de los comerciantes del mercado repetirán el próximo año, ya que «es una oportunidad y realmente habrá gente que no habrá vendido tanto como esperaba, pero el consumo ha estado bien y más teniendo en cuenta que el Ayuntamiento no nos cobra por poner el puesto».

Un año más, la mañana del domingo estuvo destinada al encuentro entre la infanta Isabel y su hermano Alfonso. Esta recreación, que poco a poco se está convirtiendo en una de las más queridas, está ambientada en un capítulo histórico acaecido entre 1470 y 1480. Uno de los datos más reseñables de este espectáculo es que ambos personajes son dos niños medinenses de 15 y 13 años, edades que se correspondían con las que supuestamente tenían los dos hermanos cuando realizaron la visita a las ferias de Medina del Campo. Después de este espectáculo, la ambientación de calle y las exhibiciones por parte de los colectivos mendinenses continuaron hasta las nueve y media de la noche, cuando la Plaza Mayor volvió a ver desfilar a los linajes de Medina: el clero, el concejo de la villa, la nobleza, los gremios y el ejército.

Tras recorrer el barrio de la Mota y las principales vías, toda la planta del desfile se congregó en la Plaza Mayor, donde la Asociación Comunera de la localidad puso el broche final con la recreación histórica del saludo de los capitanes comuneros Padilla, Bravo y Zapata.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elnortedecastilla La Feria Renacentista de Medina cuelga el cartel de completo en hoteles y restaurantes