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Recreación de la visita de una joven Isabel la Católica y su hermano Alfonso, rey de Castilla, a Medina del Campo.

Medina evoca la visita de una joven Isabel la Católica a la plaza comercial de la villa

Las recreaciones históricas concluyeron frente a la Colegiata con el saludo de los comuneros

Patricia González

Lunes, 18 de agosto 2014, 11:01

Cogidos de la mano y rodeados de damas, caballeros, escoltas y ministriles, la infanta Isabel y su hermano, el rey Alfonso XII de Castilla (dos jóvenes actores que se metieron en el papel), recorrieron a primera hora de la mañana de ayer el mercado medinense de las ferias en el que, además de charlar animadamente con algunos de los comerciantes, también fueron ovacionados por el pueblo a la voz de «¡Viva Isabel!».

Al término de su paseo matutino el primero que los hermanos realizaron a las afamadas ferias de Medina del Campo, se trasladaron hasta el Palacio Real Testamentario (lugar donde falleció la reina) donde el monarca entregó en un acto público el señorío de la villa de las ferias a su hermana y futura reina.

Con esta recreación histórica, ambientada en un capítulo que tuvo lugar entre 1470 y 1480 en la localidad, la Feria Imperiales y Comuneros inició el último día de actividades organizadas para celebrar una tercer edición renovada de esta muestra, en la que se han«desbordado» todas las cifras de participación, con casi 4.000 personas ataviadas de época durante el desfile de la quema de Medina y con un «éxito rotundo de asistencia» en todas y cada uno de las recreaciones. «Tanto es así que el palenque del Castillo de la Mota contó durante el torneo con más de 6.000 espectadores», explicó el coordinador de la muestra, David Muriel, quien recordó que «la feria no hubiera sido posible sin el apoyo y colaboración de toda la ciudadanía de Medina del Campo, quienes la sienten como propia y han hecho que este proyecto sea todo un éxito».

Y como muestra, lo vivido ayer por la mañana. Cuando las agujas del reloj de la Colegiata marcaron las 12:30 horas, y antes del canto del ángelus, Isabel y Alfonso encaminaron sus pasos desde la antigua puerta de Ávila (según los documentos conservados en el archivo municipal, hoy sería el cruce de las calles Simón Ruiz con Las Farolas) hasta la Plaza Mayor, donde al son de varios tambores y trompetas se fueron haciendo paso entre el pueblo.

«Este año, aprovechando el grupo de trabajo que habíamos creado entre las diferentes ciudades que están vinculadas con la Ruta Isabel la Católica en Castilla y León, como son Madrigal de las Altas Torres, Arévalo y Tordesillas, decidimos crear una nueva recreación y colaborar de manera estrecha», comentó Muriel, quien destacó la elevada asistencia de público a esta nueva recreación histórica que tendrá continuidad en el programa de próximas ediciones.

Una de las curiosidades de la recreación es que tanto Isabel (encarnada por Mireya del Río), como Alfonso (representado por Manuel Arévalo) eran dos jóvenes de 15 y 13 años, edades que se correspondían con las que supuestamente tenían los dos hermanos cuando realizaron la primera visita a las ferias de Medina. «Estamos muy contentos de formar parte de esta recreación. Nos hemos divertido mucho», comentaron tanto Manuel como Mireya, quienes participan de manera activa en los diferentes eventos culturales e históricos que se realizan en Madrigal de las Altas Torres y en Arévalo. El que también mostró su satisfacción fue Pablo González, quien engrosaba la compañía (guardias militares) que acompañó a los protagonistas en su paseo por el mercado.

La jornada se remató por la noche. Sobre las 22:00 horas, la Plaza Mayor volvió a convertirse en un hervidero de visitantes, quienes no quisieron perderse la última recreación histórica de esta feria, cuya figura principal fue la reina Isabel la Católica. El desfile general de las ferias del reino congregó a cientos de figurantes, que representaron los siete linajes de Medina, el clero, el concejo de la villa, la nobleza, los gremios y el ejército. Tras recorrer el barrio de la Mota, donde se realizó el saludo al alcaide, y las principales vías de la localidad, toda la planta del desfile se congregó en el atrio de la Colegiata donde se representó el saludo de los capitanes comuneros: Padilla, Bravo y Zapata y la carta de agradecimientos de Segovia a Medina del Campo. Este acto estuvo organizado por la Asociación Comunera del municipio.

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