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J. FERNÁNDEZ
Miércoles, 11 de enero 2012, 01:28
La parroquia de Cigales ha sufragado la última fase de las obras de rehabilitación del baptisterio de la Iglesia Parroquial de Santiago Apóstol ubicado a los pies de una de sus dos torres, con un presupuesto de 5.123 euros. Los trabajos han consistido en la reposición del pavimento con baldosas de barro artesanal de dos centímetros y medio de espesor, la limpieza de la capa inferior de 15 centímetros de espesor de grava y arena, la ejecución de una solera de hormigón y el saneamiento del zócalo de piedra con la intención de crear un espacio expositivo de imágenes y objetos litúrgicos de la parroquia, así como la base de la pila bautismal mediante un acristalamiento de seguridad sobre un bastidor de madera al que se ha dotado de iluminación.
En el centro del restaurado espacio, la pila bautismal de piedra del siglo XVI ha recuperado su emplazamiento original. Una pila que hace referencia al santo patrón del templo, con la forma de una gran concha. Debajo de la pila se encuentra el desagüe que llevará la canalización hasta la laguna en los cimientos de la iglesia. Para el párroco, Juan Carlos Plaza, lo más importante ha sido «la recuperación de este espacio para devolverle el uso para el que fue creado y llevar a cabo los bautismos de nuestros feligreses».
Coincidiendo con la celebración del Bautismo del Señor, la parroquia llevó a cabo una jornada de puertas abiertas para que todos pudieran apreciar el nuevo espacio restaurado de este catedralicio templo, «joya aún por pulir de nuestra provincia y comunidad autónoma. Los cigaleños, una vez más, se pudieron percatar a dónde van destinadas las ofrendas que depositan tan generosamente en su iglesia», señaló el párroco.
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