![Declaran ante el juez los monitores del menor que enfermó en un campamento](https://s1.ppllstatics.com/elnortedecastilla/www/pre2017/multimedia/prensa/noticias/201111/17/fotos/8094105.jpg)
![Declaran ante el juez los monitores del menor que enfermó en un campamento](https://s1.ppllstatics.com/elnortedecastilla/www/pre2017/multimedia/prensa/noticias/201111/17/fotos/8094105.jpg)
Secciones
Servicios
Destacamos
J. MORENO
Jueves, 17 de noviembre 2011, 01:31
El magistrado de Instrucción número 4 tomó ayer declaración a varios monitores pertenecientes a la parroquia de Santo Tomás de Aquino de Valladolid como imputados como consecuencia de la denuncia presentada por los padres del niño de ocho años Unai Hontiyuelo Álvarez, que el pasado año perdió sus dos piernas después de sufrir un proceso de infección generalizado que contrajo por una sepsis meningocócica durante su estancia en una colonia veraniega en el norte de Palencia. La patología derivó en que los médicos del hospital Clínico tuvieran que amputar al niño las dos extremidades.
Un juzgado palentino, que investiga una supuesta negligencia de los monitores encargados de atender el campamento juvenil, les citó y mediante exhorto el juez de Valladolid les tomó ayer declaración durante más de dos horas. La investigación cuenta ya con los informes de los sanitarios que atendieron al menor, tanto en el hospital Río Carrión de Palencia como en el Clínico de Valladolid, que revelarían que el retraso en el ingreso hospitalario de Unai habría derivado en que la meningitis se extendiera más rápidamente.
Los hechos ocurrieron en Palencia, entre el 1 y 8 de agosto de 2010 en un albergue perteneciente a una orden religiosa de Bilbao que posee una finca situada en San Salvador de Cantamuda. Los padres vallisoletanos enviaron durante 15 días a dos de sus hijos después de abonar 350 euros.
El pequeño estuvo en coma varios meses sin que los médicos del hospital Clínico pudieran evitar la amputación de sus dos extremidades inferiores por el proceso de gangrena generalizado. Las personas que declararon ayer fueron el coordinador del campamento y dos monitores de la parroquia que lo atendían.
Responsabilidades
Una tía del pequeño aseguró «que nos avisaron a las 14:30 horas del día 8 para que acudiésemos al Clínico, pero sin decirnos en qué condiciones iba Unai en la ambulancia que le traía desde Palencia. Cuando llegamos estaba muriéndose en la UCI». Los médicos detectaron que la sangre de su cuerpo se estaba envenenando dando lugar a una parada multiorgánica. La familia, que asegura que el niño no padecía ningún tipo de enfermedad cuando se apuntó a la colonia, quiere que se aclare si ha existido dejadez por parte de los monitores de la parroquia cuando comenzaron a detectarse los primeros síntomas entre el 1 y 7 de agosto. Los padres creen que la entidad organizadora tiene una responsabilidad.
El pequeño Unai perdió las dos piernas por debajo de la rodilla y precisa además el trasplante de un riñón. El próximo mes de diciembre se le pondrán dos prótesis.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.