Plantilla completa, pretemporada a la carrera

El Cuatro Rayas Valladolid, fiel a su filosofía, ha completado su plantilla antes de marcharse de vacaciones, por lo que el próximo día 26 de julio, Pastor podrá contar con todos sus hombres para iniciar una pretemporada que se presume especialmente dura y complicada. Solo un pero que poner a esta impecable gestión. Como en los cuentos de Astérix, hay un jugador, uno solo, que aún no ha firmado su contrato con el Cuatro Rayas. Se trata del zurdo danés Patrick Eilert, aunque los deseos del jugador y del club son tan patentes que no caben dudas sobre los colores que lucirá el vikingo.

Juan Carlos Pastor se vio sorprendido por la decisión del noruego Christopher Rambo de cambiar el balonmano profesional por la ebanistería en sus montañas escandinavas. Y no es para menos. Gastar tiempo, ganas y dinero en un hombre que te deja tirado justo cuando empiezas a percibir que su rendimiento puede ayudar al equipo es realmente frustrante. De ahí que el técnico vallisoletano pusiese sus ojos en otros zurdos con más experiencia. Pero el dinero es el dinero y en el Cuatro Rayas no sobra. Al final, otra promesa del balonmano ocupará el puesto del renegado Rambo. Patrick Eilert, un danés con 204 centímetros. No ha destacado la pasada campaña en Torrevieja, pero algo ha debido ver Juan Carlos Pastor en este danés para dar el paso de incorporarlo a la disciplina del Cuatro Rayas Valladolid.

Y no es el único. El otro fichaje, el otro lateral, el diestro, también es un jugador joven que ha militado en el Arrate y que fue el segundo máximo goleador de su equipo, aunque también defiende.

Y como no hay dos sin tres, el Cuatro Rayas tuvo que reaccionar contrarreloj tras la sorpresiva marcha de Svensson a tierras alemanas. Y encontró a Yeray Lamariano, un guardameta en plena madurez que sabe lo que es estar a la sombra de un primer portero. Las dificultades económicas del Antequera facilitaron su llegada a Valladolid. A los quince profesionales de la plantilla habría que añadirles a los júniors Víctor Megías Pino (extremo-lateral) y Álvaro Rogel (central) y el juvenil de 16 años Miguel Lacasa (extremo).

Así pues, Eilert, Tokic y Lamariano son los sustitutos de Svensson, Tvedten, Rambo y Bilbija. De entrada un hombre menos, quince en total, por aquello de las restricciones del presupuesto. Las comparaciones son odiosas, pero a simple vista todo hace indicar que el equipo, cuando menos, ha perdido en experiencia...

A su favor, la plantilla del Cuatro Rayas tiene una temporada trabajando juntos. Y eso se nota. Y mucho. Todos conocen perfectamente los sistemas e incluso algunos tienen aún un enorme margen de mejora que deben explotar esta temporada. A poco que los nuevos sumen su pequeño granito de arena, los resultados no tardarán en llegar.

Pretemporada a la carrera

Y este es precisamente uno de los 'handicaps' de la temporada. Los vallisoletanos formalizaron el pasado viernes ante la EHF su deseo de organizar el torneo de invitados de la Liga de Campeones, algo a lo que también aspiran los alemanes del Rhein Neckar y los polacos del Vive Kielce. Sea quien sea el que se lleve el gato al agua, el torneo se disputará el 3 y 4 de septiembre, una semana antes de comenzar la temporada. Ello quiere decir que para ser competitivos en dicho torneo, en el que solo se clasifica el vencedor, los de Pastor tienen que estar el día 3 de septiembre al 100% del rendimiento ya que la entidad de los rivales no da opción.

El día 26 de julio se inicia la pretemporada y desde el primer día hay que pensar en ese 3 de septiembre. Entre medias, tan solo cinco partidos amistosos para comprobar el potencial del equipo. Sin lugar a dudas, el torneo amistoso de Morbihand, en Francia, ante el Kolding y el Nantes justo una semana antes del torneo de invitados será una excelente piedra de toque para conocer el potencial del nuevo Cuatro Rayas Valladolid.

La ventaja de comenzar tan pronto al 100% es que se llegará al inicio de la liga, el 10 de septiembre, con las pilas puestas y la posibilidad de dar más de una sorpresa a poco que el calendario, que se sorteará el próximo 8 de julio, sea benigno para los intereses vallisoletanos.

Abonados y Huerta del Rey

El club ha decidido posponer su traslado al Pisuerga, salvo que tenga que disputar la Liga de Campeones. Sin duda alguna, el coliseo de Huerta del Rey inspira más confianza y ofrece más seguridad a los hombres del Cuatro Rayas, ya que es donde entrenan y donde la afición está más cerca de los jugadores. Y aparte de las causas deportivas y afectivas, el gran motivo de seguir en Huerta del Rey es que el número de socios se queda muy corto para llenar las 3.100 plazas de un polideportivo que necesitaría una remodelación para adaptarse a las normas europeas.

Ahora, la campaña de abonados del Cuatro Rayas, que ya ha obviado la imagen de Svensson, sigue a buen ritmo en las oficinas del club y con notables obsequios para todos aquellos que renueven su carné antes del 15 de julio. La realidad se ha impuesto en la directiva del Cuatro Rayas, que estimaría como excelente una cifra que estuviese cercana a los 3.000 socios.