«Porque la merecemos»

«Vienen a ver y preguntar y nosotros tenemos mucho que decir». El alcalde, Pedro Arahuetes, incidía ayer en la relevancia que encierra la visita que hoy hará una representación del jurado que evalúa los méritos de la seis ciudades españolas finalistas al título de la Capitalidad Cultural Europea de 2016. Segovia ha de estar, hoy más que nunca, radiante; ha de latir el compromiso cotidiano y la implicación natural y la cercanía que cada día exhiben sus ciudadanos y su actividad. La ciudad debe ser ella misma, sin artilugios ni artificios desplegados ante las insignes visitas a las que, por otro lado, tan acostumbrada está ya. Sin ir más lejos, hace una semana la reina Doña Sofía presidía ante el Acueducto el concierto del Festival Internacional de la Creatividad Infantil encuadrado en el año dual hispano-ruso y que reunió a los mejores jóvenes talentos artísticos de ambos países.

Segovia quiere revivir el estallido espontáneo de júbilo de aquel 30 de septiembre de 2010, fecha en la que se reafirmó en que la luna de la capitalidad cultural no era una entelequia, sino una oportunidad real. Su sociedad anhela con fervor repetir el sonoro aplauso cargado de naturalidad que resonó aquel día en el auditorio 400 del madrileño Museo Reina Sofía. Unas pocas horas antes de que la jota tradicional segoviana y la bandera con el logotipo tomaran aquel escenario en todo un enaltecimiento al espíritu segoviano para celebrar el paso del corte, Segovia 2016 se sometía el examen del tribunal evaluador, cuya delegación recala hoy en la ciudad tras visitar Zaragoza, San Sebastián y ayer Burgos.

Ya entonces, aquel imborrable 30 de septiembre, el regidor cerró la presentación con ardor sincero y sentida emoción. Pedro Arahuetes puso el broche a aquella intervención ante los trece miembros del jurado con una petición: que los expertos dieran a Segovia la oportunidad de ser Capital Europea de la Cultura. Y lo hizo «no por pedir, sino porque la merecemos».

«El alma de los segovianos»

Han pasado 144 días de aquel hito que empezó a escribir la historia de un nuevo modelo de ciudad por el que apuesta la candidatura segoviana. La aspiración concita el respaldo unánime de los agentes económicos, sociales, culturales y políticos, más allá de colores y siglas, como demuestra que en el recorrido que la delegación del jurado haga hoy, sus integrantes estarán acompañados por los representantes electos del Partido Popular y de Izquierda Unida en los últimos comicios municipales, Jesús Postigo y Luis Peñalosa, respectivamente.

Hoy solo existe un pacto, el del sueño de la capitalidad de 2016, porque, como también sentenció Pedro Arahuetes en su alocución al tribunal hace algo más de ocho meses, «el alma de todos los segovianos está en este proyecto».

Tampoco habrá que echar en falta la presencia de otras administraciones, porque, al fin y al cabo, la propuesta no de ja de ser un «modelo de territorialidad», como ha manifestado en repetidas ocasiones la directora gerente de la Oficina Segovia 2016, Nuria Preciado. Así, arroparán al jurado en distintos puntos del itinerario el presidente de la Diputación, Javier Santamaría y la consejera de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León, María José Salgueiro.

El alcalde bosquejó ayer a grandes pinceladas que el programa diseñado para la visita de hoy intentará aportar una «visión exhaustiva de las distintas infraestructuras culturales, patrimoniales y paisajísticas de la ciudad». Técnicos y autoridades políticas estarán a disposición del jurado. Durante la jornada se incorporarán, además, representantes de los espectros cultural económico y cultural de esta «pequeña gran ciudad europea capaz de albergar un título de estas características, pero a la vez cercana gracias a su reducido tamaño y a una población acostumbrada a una vida cultural y turística muy activa».

Molinillos y pins

Para demostrar este dinamismo, los balcones, ventanas y escaparates de la capital se llenarán de los 3.000 molinillos de viento elaborados para la ocasión con los colores del logotipo ideado por la diseñadora Ren Tinting. La Oficina Segovia 2016, que también anima a todos los ciudadanos a lucir el pin que simboliza la ambición local, no paró ayer de surtir de molinillos a la ingente demanda.

El recorrido propuesto al jurado se acerca lo máximo posible a la experiencia que puede vivir un visitante. En un día cualquiera, el viajero que recala en la ciudad puede pasear por la Segovia intramuros y extramuros o andar por el cinturón verde que rodea la urbe. En su camino puede encontrarse actividades culturales de todo tipo y también ver cómo la ciudad se transforma para responder a las necesidades de la población, siempre respetando el entorno urbano y natural, explican fuentes de la Oficina que dirige Nuria Preciado.

El presidente del comité de selección, Manfred Gaulhofer, encabezará la delegación. Con él vienen otros tres integrantes del tribunal -Danuta Glondis, Emilio Cassinello y Jordi Pascual-, a quienes acompaña la comisaria europea responsable del programa de la Capitalidad Europea de la Cultura, Jacqueline Pacaud, y cinco personas de la Autoridad de Gestión, encargada de la logística del viaje.

El casco histórico de la ciudad y sus monumentos acapararán parte del itinerario, con visita al Acueducto y un paseo por la Calle Real, San Martín, el Torreón de Lozoya, la Judería, la Plaza Mayor, el teatro Juan Bravo y la iglesia de San Juan de los Caballeros. Segovia 2016 también exhibirá su capacidad de renovarse para transformarse en un laboratorio de cultura, innovación y creación y enseñará al jurado las actualizadas instalaciones del Palacio de Quintanar, la remodelada Casa de la Moneda recién rehabilitada o el centro de creación de La Cárcel.

Once horas de visita

También está previsto un itinerario por los escenarios naturales y las riberas del Clamores. Y es que el diálogo con el paisaje se alza como uno de los cuatro ejes sobre los que gira el programa de la candidatura.

El alcalde en funciones, la concejala de Cultura, Clara Luquero, el personal de la Oficina Segovia 2016 y el equipo creativo que ha redactado el dossier final serán los encargados de recibir al jurado. La visita se alargará desde la 10:00 hasta las 21:00 horas, donde habrá tiempo para descansar y reponer fuerzas con degustaciones de la rica gastronomía tradicional segoviana.