El Cuatro Rayas se cuelga el bronce

El conjunto libanés del Al Sadd, con el refuerzo de las estrellas del Cuatro Rayas Valladolid, conquistó la medalla de bronce en la Super Globe de Catar después de derrotar al Zamalek egipcio por un contundente 28-23. De esta forma, el equipo libanés accede por primera vez en su historia al palmarés de la Super Globe o Mundialito de clubes, después de que la temporada pasada se quedase a las puertas precisamente ante el conjunto egipcio.

En esta ocasión, el refuerzo de los siete hombres del Cuatro Rayas Valladolid y de su técnico Juan Carlos Pastor, han dado sus frutos. De hecho, en el partido de ayer, los vallisoletanos anotaron 23 de los 28 tantos. Para este choque decisivo, Pastor optó por Krivokapic, Tvedten, Edu, Gurbindo y Perales como hombres de campo y que prácticamente jugaron todo el encuentro, junto con Sierra, una vez más un muro con el 36% de los lanzamientos parados.

La igualdad inicial estuvo marcada por las exclusiones en el conjunto libanés de Edu, Krivokapic y Khoder (2). En el minuto 20 y con empate en el marcador (9-9), Pastor solicitó un tiempo muerto para ajustar la defensa. El resultado fue que el Al Sadd se marchó al descanso con una ventaja de tres tantos (13-10) que sería una losa para los egipcios.

En la segunda mitad, los discípulos de Pastor supieron jugar con el marcador a favor y además encontraron en Marko Krivokapic y en la habilidad de Havard Tvedten a los estiletes finalizadores que masacraron la portería egipcia con la colaboración de Perales y del libanés Nahas Khoder, un zurdo que se convirtió en el estandarte de su club tanto por sus minutos sobre la cancha como por su rápida adaptación al estilo de juego de los de Pastor.

El equipo egipcio intentó remontar, pero las paradas de Sierra se lo impidieron y los últimos minutos se convirtieron en una fiesta para el equipo libanés Al Sadd, al conseguir con el bronce en la Super Globe el mayor éxito de su historia.

En la final entre el Ciudad Real y el Kiel, los alemanes remontaron el 10-14 del descanso para llevarse el triunfo en la segunda mitad por 28-25, impidiendo de esta manera que los manchegos revalidasen el título honorífico de campeón mundial de clubes.

Tras la final, se llevó a cabo el protocolario acto de entrega de trofeos y medallas, con un pequeño homenaje a los jugadores franceses en el torneo como campeones del mundo (Joli, Narcisse, Omeyer, Dinart y Abaló). Y nada más terminar la entrega de medallas, la expedición del Cuatro Rayas salió rumbo al aeropuerto de Doha para regresar hoy mismo a Valladolid. El tercer puesto y el Ademar esperan el sábado.