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f. de la calle
Nava de la Asunción
Domingo, 24 de septiembre 2017, 12:19
Vibrante segundo encierro por el campo de las fiestas de Nava de la Asunción el que se celebró en la mañana de ayer sábado. Tras tomar la salida en los corrales del pinar de Las Ordas, la manada se disgregó pronto, repartiéndose también los caballistas ... en busca de las reses.
A los pocos minutos de iniciarse el festejo, llegó un primer novillo a la Cañada Grande envuelto en una nube de polvo y caballistas, muchos más numerosos que en el encierro del viernes. El segundo astado provocó varios momentos de peligro al escapar del recorrido habitual ya en la zona junto al antiguo depósito del agua. Tras embestir a coches y caballos, los caballistas lograron reconducirlo hasta la plaza de toros. El resto del ganado llegó poco después, pero en dos grupos muy seguidos, por un lado dos novillos y un tercero acompañando a los mansos. Uno de los astados quedó finalmente rezagado antes de enfilar la última recta urbana del recorrido, momento para el disfrute de los cientos de personas que aguardaban allí como público la llegada del ganado. Tras varias intentonas y embestidas a las talanqueras, algunos corredores lograron que el novillo entrara en el coso, pero se tuvo que emplear la soga para que entrara en los toriles y poder dar por finalizado el encierro.
El largo y concurrido vermú con actuaciones musicales repartidas por la localidad, dio paso al espectáculo de rejoneo de la tarde, con Raúl Martín Burgos, Óscar Borjas y Juan Manuel Munera. El ganado del maestro Roberto Domínguez, presente en la plaza, dio un juego desigual, pecando de mansos en su mayoría. Sin levantar grandes pasiones y matando todos considerablemente mal, lograron hacerse con trofeos. Raúl Martín una oreja a cada uno de sus astados y lo propio Juan Manuel Munera con sus antagonistas. Óscar Borjas se tuvo que conformar con un apéndice de su primero y la vuelta al ruedo en su segundo.
Por otro lado, la comisión de peñas La Funcionera, ha mostrado su satisfacción por la buena respuesta del público con el concierto de Los Rebujitos y la actuación de DJ Nano de la noche del viernes. Alrededor de 1.400 personas abarrotaron la Plaza Mayor para un concierto que se retrasó más de dos horas por algunos problemas de sonido que finalmente pudieron solventarse.
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