La indemnización a la limpiadora que cayó en una tumba deja a Cobos de Segovia sin planes de obras

El pasado septiembre se pagó la primera de las tres anualidades de 4.000 euros que el Ayuntamiento de Cobos de Segovia, entidad local menor de Sangarcía, tiene que abonar a la trabajadora de limpieza que en el verano de 2011 cayó a una fosa del cementerio. Los tribunales le dieran la razón y obligaron al Ayuntamiento a indemnizarle con una cantidad superior a los 50.000 euros, lo que ha terminado de asfixiar la economía de una pedanía cuyo presupuesto anual ronda los 20.000 euros.

El actual alcalde, José Mariano Agüero Llorente, afirma que las finanzas municipales están con el agua al cuello. Y eso que en el anterior mandato se llegó a un acuerdo por el que el Ayuntamiento se comprometía a pagarle 15.000 euros y otros 12.000 euros en abonos anuales de 4.000 euros durante tres años si la trabajadora accedía a rebajar sus pretensiones económicas, que rondaban los 80.000 euros.. Y así se está haciendo. La institución abonó los primeros 15.000 euros en 2014, aunque para ello tuvo que subastar seis parcelas municipales de uso agrícola para conseguir una liquidez que no tenía.

También se ha conseguido pagar la primera anualidad de 4.000 euros, pero la deuda está haciendo estragos en las arcas municipales. «No podemos acceder a los planes de obras porque no tenemos dinero para hacer frente a la aportación municipal. Aunque la Junta de Castilla y León y la Diputación de Segovia financian un 70%, nosotros no podemos hacernos cargo del 30% restante. Esos 4.000 euros sí que nos permitirían llevar a cabo alguna actuación», señala Agüero.

También ha habido que recortar de las fiestas. «Otros años las pagaba el Ayuntamiento, y este se han podido hacer con las aportaciones de los vecinos y con el dinero que nos han dado algunas empresas», señala el alcalde. Y todavía faltan por pagar 8.000 euros.

En julio de 2011

La historia tiene trazas de película de Berlanga. Ocurrió el 15 de julio de 2011. María del Carmen fue contratada por el Ayuntamiento para labores de limpieza en el municipio gracias a una subvención de la Junta. A los pocos días de incorporarse, le encargaron ir al cementerio y fumigar las hierbas que crecen entre las fosas. La mujer pisó una de ellas y la tapa no aguantó sus 120 kilos de peso. María del Carmen cayó al fondo y se partió los tobillos. Era una fosa de tres metros y estaba vacía. Para poder sacarla del agujero tuvieron que acudir los bomberos de Segovia, que tardaron más de dos horas en completar un rescate complicadísimo. La limpiadora acudió entonces a los tribunales y ganó el pleito. Un mazado del que Cobos de Segovia tardará años en recuperarse.