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virginia gómez
Viernes, 5 de diciembre 2014, 13:32
La nueva fábrica de Los Joaquines comenzará a levantarse de nuevo en Pinillos de Polendos a principios de 2015, en el mismo solar en que, en tan solo unas horas, un fuego ocasionado tras un cortocircuito acabó el pasado mes de julio con un negocio de 25 años. Será una planta más moderna, que requerirá una inversión aproximada de 5,5 millones de euros.
Sus propietarios, los hermanos Joaquín, Bustar y Carlos López, tienen previsto incrementar las líneas de trabajo; elevar la producción de jamones y embutidos en 50.000 toneladas frente a las 100.000 que generaba antes del incendio, y aumentar los puestos de trabajo.
Joaquín y Bustar López se han reunido este viernes en la Delegación Territorial de la Junta con la consejera de Agricultura y Ganadería, Silvia Clemente, y el presidente de la Diputación de Segovia, Francisco Vázquez, en un encuentro en el que han estado presentes asimismo la viceconsejera de Desarrollo Rural y directora del Instituto Tecnológico Agrario (Itacyl), María Jesús Pascual; el delegado territorial de la Junta, Javier López-Escobar, y el diputado de Promoción Económica, Rafael Casado.
Ambos empresarios han explicado sus planes de reconstrucción de la fábrica que, según las previsiones y si no hay imprevistos, volverá a abrir sus puertas a mediados de 2016 más avanzada tecnológicamente, lo que permitirá reducir costes de producción. Además, las nuevas líneas y la apertura a mercados exteriores favorecerán la creación de puestos de trabajo directos.
Antes de la catástrofe, en la planta estaban empleadas seis personas, todas ellas vecinas del entorno, a las que se sumaban los tres propietarios. La empresa, que se vio obligada a extinguir todos los contratos, mantiene el compromiso de preservar en el futuro al mismo equipo de trabajadores, algunos de los cuales han podido recolocarse en otras factorías gracias a la campaña de Navidad, aunque con contratos temporales.
Bustar López ha garantizado la viabilidad del proyecto que Los Joaquines ha planteado para las nuevas instalaciones, para las que han solicitado a la Junta una ayuda de unos 2,5 millones de euros. El Gobierno regional les ha ofrecido un apoyo directo a través de la convocatoria que este mes de diciembre estará disponible para las industrias agroalimentarias de Castilla y León, que permitirá promover la creación de empleo. Asimismo, ha puesto a su alcance las líneas de préstamo del Banco Europeo de Inversiones, que facilitará el líquido necesario para aspectos como la adquisición de materia prima.
La consejera ha calificado como una buena noticia la recuperación de esta planta en una provincia pujante en el sector porcino, que concentra el 34% de las cabezas reproductoras de la comunidad.
Los propietarios, por su parte, han valorado el apoyo recibido no solo por parte de la Administración regional, sino también de la Diputación Provincial, que ha puesto a su disposición la marca Alimentos de Segovia para la promoción futura de los productos, así como del Ayuntamiento de Pinillos, que ha eximido a la empresa del pago del permiso de obras. También han destacado el respaldo trasladado por las entidades financieras con las que trabajan.
Las pérdidas tras el fuego, que redujo a cenizas la planta ante el asombro de las decenas de vecinos que presenciaron el drama el pasado verano, se estiman en unos dos millones de euros.
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