Las condiciones de la cesión del castillo de Miranda del Castañar no convencen a los vecinos

Las asociaciones de Miranda del Castañar se reunieron ayer para valorar la oferta de los actuales dueños para ceder la propiedad del castillo de la localidad al municipio.

Miembros de la FundaciónVirgen de la Cuesta, de la Asociación de la tercera edad San Isidro, de la Asociación de mujeres La Venera y de la Ampa Virgen de la Cuesta, además de un gran número de vecinos y representantes del Ayuntamiento, estuvieron debatiendo sobre las condiciones que ofrecen los actuales dueños del castillo para cederlo.Y parece ser que no convencieron.

Según la concejala de Cultura de la localidad, Encarnación Torija, los propietarios han ofrecido donarlo al municipio a cambio de tener derechos sobre su gestión. «O sea, quieren dárnoslo para que lo reformemos, porque está en ruina, pero llevarse ellos un beneficio en vez de arreglarlo».

Y es que, desde que el 11 de octubre se desplomaran algunas piedras de la edificación medieval, se abrieron diferentes gestiones administrativas que han acabado con el inicio de un expediente de ruina sobre el monumento, elemento central de la villa, que está declarada como Conjunto Histórico desde 1973.

«Se denunció la caída de las piedras a la Diputación, que mandaron a unos técnicos, quienes elaboraron un informe asegurando que el desplome era inminente», señala la concejala, quien indica que el pasado viernes ese «desplome inminente» fue confirmado por técnicos de patrimonio «quienes nos informaron de que se notificaría a los propietarios, que tendrían seis meses para ejecutar las mejoras convenientes».

Sin embargo los propietarios parece que no están dispuestos a hacer dichas mejoras y la oferta por su parte tampoco convence ni a la administración ni a los vecinos. «Se va a trabajar por lograr una cesión total, sin condiciones, o una expropiación», señalaba Torija.

Dos vías

Para lograr este objetivo, ayer se creó una plataforma integrada por todas las asociaciones del municipio, que intentará hacer presión por la parte ciudadana y recoger firmas para que las administraciones y los propietarios del castillo lleguen a acuerdos que beneficien al municipio y permitan mantener el castillo, declarado Bien de Interés Cultural (BIC), en óptimas condiciones.

«Ahora mismo es un peligro, para los transehúntes en general y los niños en particular», señalan las asociaciones en un escrito que remitirán a Diputación, indicando también que el estado de conservación del castillo da «mala imagen de nuestro pueblo». Por el momento, la recién creada plataforma, en la que no está el Ayuntamiento «para asegurar su continuidad en el caso de un cambio en el color político tras las elecciones», se ha propuesto recoger mil firmas.

Por su parte, el Ayuntamiento seguirá haciendo gestiones en este tema. «Seguiremos hablando con las diferentes administraciones competentes buscando una solución, ya que el castillo hay que rehabilitarlo como sea», señala la concejala de Cultura.

Los propietarios

Ante las quejas de los vecinos, algunos de los propietarios que se personaron en el acto para conocer la opinión del municipio, señalan que «la expropiación no es la solución, lo que hay que buscar es la manera de rehabilitar el castillo y es algo en lo que estamos trabajando».

En conversaciones con este periódico, parte de estos propietarios señalan que la oferta hecha recientemente no es nueva y que llevan 10 años de conversaciones con los diferentes consistorios, buscando una fórmula para llevarla a cabo.

«Les propusimos lo mismo que se hizo con el castillo de Belmonte, en Cuenca, es decir que se cedía al Ayuntamiento, manteniendo la gestión del castillo con los propietarios, de manera que se pudieran recoger subvenciones del Ministerio de Cultura» señalan, añadiendo que «a ellos les ha funcionado muy bien, pero aquí lo rechazan y nos acusan de querer aprovecharnos, cuando nuestra familia lleva más de 40 años haciendo intervenciones en el castillo».

Respecto al problema de la caída de las piedras señalan que, cuando sucedió, se actuó «rápidamente, contratando a una empresa que no solo las recolocó, sino que recorrió todo el castillo y quitó algunos árboles, ya que la vegetación es el mayor problema para el castillo».

En referencia a los informes de Diputación y de Patrimonio que señalan al castillo de Miranda en riesgo de ruina inminente, los propietarios señalan que «el castillo está en ruina desde hace 400 años, pero su rehabilitación completa cuesta mucho dinero y en cualquier caso no se trata solo de coger una subvención y arreglarlo, sino que hay que hacer un plan de trazabilidad para estudiar qué se va a hacer con él, qué uso se le va a dar, y en estamos dispuestos a consolidarlo».

Por último, insisten en que lo mejor para el castillo es rehabilitarlo «con el apoyo de la administración, que es lo más rápido y sencillo, por eso propusimos la cesión al Ayuntamiento, porque tendría más facilidades para lograr ese apoyo».