El asesino de Denise asegura que las manos de la peregrina «no se van a encontrar» en su finca

Pausado, tranquilo, integrado «como uno más». En el interior de la prisión de Villahierro, en Mansilla de las Mulas, el asesino confeso de la peregrina Denise Pikka Thiem se ha convertido en «un interno común» dentro del Módulo 12 de este centro penitenciario. Miguel Ángel M. BV., que sigue bajo el protocolo de prevención de suicidios, ha hecho 'migas' en sus primeros días en el interior de la cárcel con el acusado por el crimen de Boñar.

Miguel Ángel M. y Alberto L., éste último encarcelado por golpear y matar con un martillo a su pareja en la localidad leonesa de Boñar en febrero de este año, pasean juntos por el patio de su módulo y realizan diferentes actividades juntos.

Ahora a ambos se les ve paseando y charlando en el interior del patio del centro de Villahierro, donde conviven con otro centenar de internos. Lo hacen con «aparente normalidad» y sin «destacar» sobre el resto de internos.

Mientras el acusado por el crimen de Denise sigue con su proceso de adaptación al centro penitenciario, en el entorno de su vivienda la Policía Nacional prosigue con la búsqueda de las manos de la peregrina. Para la investigación es importante localizar estos miembros porque, de su análisis, podría desprenderse si hubo forcejeo y agresión previa a la muerte de la peregrina.

En la reconstrucción del crimen el acusado «delimitó un espacio» de búsqueda de las manos de Denise, un área de «doce metros de profundidad por dos de ancho», según ha señalado su primera abogada defensora. «Sobre el cuerpo fue muy preciso pero sobre las manos dijo que no podía ser tan preciso y señaló un espacio de doce metros de largo», ha asegurado la letrada.

Escondidas en una madriguera

Además a los investigadores Miguel Ángel M. les ha advertido de que los miembros fueron escondidos «en una madriguera» por lo que no se descarta que éstos terminaran en manos de alimañas. «Las manos puede que no aparezcan», ha llegado a asegurar el acusado.

«Yo he llegado a la conclusión personal que igual lo que se busca no está en la finca de Miguel Ángel Muñoz», también ha advertido la primera abogada del acusado, Rosario Martín.