Vuelve Alonso

«Fernando Alonso volverá al 'cockpit' en Malasia», titulaba el comunicado con el que McLaren confirmaba el regreso del asturiano a la competición. Alonso ha sido sometido a un «programa de entrenamiento riguroso y especializado, diseñado y monitorizado de cerca por científicos del deporte, para asegurar su salud y el regreso a tiempo a la competición», según señala la escudería británica en el texto que más estaban deseando leer casi todos los aficionados españoles a la Fórmula 1.

     El bicampeón español debutará en la temporada 2015 con un monoplaza notablemente delicado, tras un exceso de pretemporada forzado por un accidente del que se van conociendo poco a poco más detalles. Pese a que McLaren aseguraba no hace tanto que el coche no había tenido ningún problema, se ha visto obligada a admitir que algo no funcionó como debía. «Fernando recuerda que sintió la dirección dura en los momentos previos al accidente», aseguran en el comunicado.

Las dos jornadas de simulador que pasó Fernando Alonso la semana pasada dieron mucho de sí. El español se estuvo habituando a los diferentes mecanismos del McLaren Honda MP4/30, algo que ya se sabía, pero también dedicó buena parte de las jornadas a charlar con los ingenieros. Y es que Alonso, poco a poco, ha ido recordando más detalles de lo ocurrido en Montmeló ese 22 de febrero. El español estuvo repasando los datos obtenidos de la telemetría -esa que en teoría aseguraba que en el coche no falló nada- junto a los ingenieros, tanto los de 'campo' como los 'senior'. Tras ver lo ocurrido, y después de la confesión de Alonso, en McLaren se han visto obligados a instalar más sensores de cara a la cita de Malasia, en el que medirán cualquier variación no prevista en la dirección del MP4/30.

Un debut muy complicado

Pocos circuitos hay menos propicios para que McLaren rete la fortaleza de la unidad de potencia Honda. Malasia es uno de los trazados que más castiga las mecánicas, por las altísimas temperaturas que deben soportar además de una intensa humedad. Todos los equipos temen una rotura o un fallo mecánico para este próximo fin de semana, pero McLaren especialmente. Saben que el motor Honda es mucho más frágil de lo que desearían, y ya tuvieron que tirar uno a la basura en Australia, el de Magnussen que se destrozó en la misma vuelta de formación.

Con estas previsiones, todo lo que sea acabar para Fernando Alonso será una buena noticia. Aunque desde McLaren anuncian que el español está deseando subirse al coche, son conscientes de que, de momento, sólo servirá para que recolecte datos útiles de cara al desarrollo en pista. La falta de kilometraje en pretemporada sigue pesando demasiado, y no será hasta el regreso a Europa cuando realmente se podrá medir hasta qué punto está con respecto al resto de pilotos.

Alonso vuelve al circuito donde logró su primer podio y su primera 'pole', algo que ni mucho menos se repetirá este fin de semana. Un circuito donde el acelerador está presionado a fondo durante el 30% de la vuelta no es el mejor escenario posible para un McLaren que sufre, precisamente, de potencia. Tanto es así que la medición del tan manido concepto 'otro milagro de Alonso' será tan simple como que sea capaz de hacer llegar el coche a meta.