

Secciones
Servicios
Destacamos
César R. Cabrillo
Miércoles, 4 de mayo 2016, 06:25
Si el Atlético Valladolid consigue al menos tres de los seis puntos restantes podrá festejar por todo lo alto su ascenso a la División de Honor del balonmano español.
Tres jornadas, 180 minutos y un sueño por cumplir. Eso es lo que debe estar pensando todo el Atlético Valladolid. Afición, jugadores, cuerpo técnico, directiva, todos los que tienen alguna relación con este equipo que tiene en su manos un ascenso histórico para un club con poca más que un año de historia y que surgió de las cenizas del Balonmano Valladolid.
Después de haber 27 partidos esta temporada, el conjunto dirigido por Nacho González puede afirmar que tiene a tiro de piedra el ascenso a Asobal y mucho se deberían torcer las cosas en los tres últimos encuentros de liga para que el Atlético Valladolid no esté entre los mejores equipos del país por primera vez en su historia.
Los números no mienten
Tras hacer un repaso de los rivales que le quedan al equipo vallisoletano en estos últimos tres partidos el rival más complicado es Bidaosa, después de haber vencido a otro de los equipos complicados la pasada jornada, el Bm Gijón. Al Atlético Valladolid le sirve con ganar dos de estos tres encuentros para certificar su presencia en Asobal la próxima temporada, aunque si Irún pierde esta jornada ante el Ciudad Real, todo quedará decidido.
El conjunto irundarra es ahora mismo el inminente perseguidor de los vallisoletanos por la liga, pero la diferencia de cuatro puntos entre ambos hace muy complicado que puedan alcanzarlos, salvo que el propio Atlético Valladolid meta la pata en alguno de los partidos que le quedan. Los gladiadores azules pueden permitirse el lujo de tropezar en Irún y conseguir el ascenso en la última jornada ante el Bm Antequera.
Si el Atlético Valladolid consigue los dos puntos ante Bordirls este fin de semana les valdrá con empatar en Artaleku para certificar su ascenso de manera matemática. De perder, como ya se ha dicho, habría que esperar a la última jornada.
Poniéndonos en el peor de los escenarios, es decir, que los vallisoletanos perdieran los partidos que le restan y que Bidasoa y Palma del Río consiguieran sus victorias, la clasificación daría un vuelco por completo. Los de Irún ascenderían de manera directa, Palma del Río organizaría la fase de ascenso y el Atlético Valladolid sería tercero. Esto es así porque pucelanos y cordobeses empatarían a puntos y estos últimos son los que tienen el 'golaverage' particular ganado.
Otro hipotético escenario podría ser que el Atlético Valladolid tan solo consiguiera ganar un partido de los tres que le quedan. En ese caso, los de Nacho González, al menos, se asegurarían la segunda posición y el primer puesto se determinaría por la diferencia de goles entre irundarras y atléticos, pues estarían empatados a puntos. Teniendo en cuenta que en este escenario el conjunto vallisoletano solo ganaría un partido, debería pasar lo siguiente para perder su primer puesto en el partido ante el Bidasoa: perder por más de cuatro goles de diferencia o perder por cuatro tantos y no anotar más de 27 tanto. Todo lo contrario a esto sería positivo para el Atlético Valladolid, es decir, ganar, perder por menos de cuatro o perder por cuatro y anotar más de 27 goles. Con cualquiera de esos resultados los vallisoletanos se asegurarían la primera plaza.
Aún más difícil
Si hay un resultado muy complicado para que se de en el balonmano, este es el empate, pero como todo es posible también habría que contemplar estos posibles resultados. Incluso empatando los tres encuentros que le restan el Atlético Valladolid terminaría en primera posición.
De igual manera si los de Nacho González empataran uno o dos y ganaran los otros encuentros se asegurarían el ascenso directo.
La cosa cambia cuando en este escenario uno o dos partidos acabasen en tablas y perdiera los otros. En ese caso, el primer puesto podría determinarse por el 'golaverage' entre Atlético Valladolid y Bidasoa. Aunque también dependería de que el empate fuera o no en Irún. De empatar en Artaleku la entidad presidida por Mario Arranz se aseguraría el primer puesto.
Todos estos supuestos se han elaborado contando con que Bidasoa y Palma del Río, en un segundo plano ganaran sus partidos. Con que los de Irun pierdan tan solo uno de los encuentros que le quedan se despedirán del ascenso directo.
Las cuentas está hechas, aunque viendo la dinámica de este equipo, el único resultado que aceptan es la victoria partido tras partido. Con esa fórmula el ascenso está más que garantizado y Valladolid volverá a disfrutar de los mejores equipos de balonmano del panorama nacional.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
La sede del Reina Sofía estará lista a finales del próximo año
El Diario Montañés
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.