Cuando las series van sobre ruedas

¿Qué fue antes, el huevo o la gallina? ¿Qué hace falta para convertirse en un modelo icónico? ¿Se puede conseguir el éxito gracias a una serie o, al contrario, puede dotar un modelo mítico de un carácter peculiar a un personaje?

Algo es indiscuble. Todos los coches están intimamente ligados a su dueño y son un fiel reflejo de su carácter.

1.- Pontiac Trans Am. El coche con nombre (El coche fantástico)

No hay coche más mítico, especial y deseado que Kitt. La mejor muestra es que dispone de nombre. Un vehículo que habla y ayuda en toda circunstancia a su dueño, Michael Knight. Las puertas se abrían y cerraban solas, contaba con una base de datos que ya la quisiera cualquier servicio de inteligencia y disponía de un control remoto que le permitía buscar a Michael si lo necesitaba. Eso sí que es un 'smartcar' y lo demás son tonterías. Por supuesto, el modelo original no tenía todos estos 'extras' pero la serie le convirtió en el modelo de coche que todo el mundo recuerda.

2.- GMC Vandura. Una furgo para todos (El Equipo A)

General Motors es la marca que firma la furgoneta en la que los componentes del Equipo A acudían a todo tipo de misiones. Lo más curioso es que no siempre usaron el mismo modelo para el rodaje, con lo que en un solo capítulo se puede ver cómo cambia la apariencia de la furgoneta: el número de faros, distinto color del logotipo, etc. El modelo data de 1983 y tiene capacidad para 7 personas, de sobra vaya. Aunque no tiene tanta presencia como en otras series de la época, es, sin duda una seña de identidad.

3.- Ferrari Testarrosa. El segundo de la fila (Corrupción en Miami)

Sonny Crockett y Ricardo Tubbs comenzaron sus aventurillas infiltrados entre bandas de narcotraficantes y demás delincuentes con un supesto Ferrari Daytona Spider 365 GTS 197. Nada más lejos de la realidad. Ferrari América se negó a prestar coches de este modelo originales por lo que tuvieron que 'tunear' un Chevrolet Corvette C3. Gracias al éxito de la serie Ferrari terminó reculando. Enzo Ferrari se enteró de lo que había pasado y llamó a la productora para ceder dos Ferrari Testarrosa usados desde la tercera temporada. La 'excusa' del guión para cambiar de coche fue giro en el que el Daytona Spider original acaba destrozado. Por eso, el Testarrosa es el verdadero coche de 'Corrupción en Miami', en sentido literal.

4.- Ford Torino 1975. Una 'bala' contra el crimen (Starsky y Hutch)

Se le considera la serie base para todas las que tienen como tema central una pareja de policías. Lo del coche puede que sea por la particularidad de su pintura: el rojo rabioso y la franja blanca de este coche se convirtió en todo un éxito catapultado por la famosísima serie de los setenta. En la televisión tenía un aspecto ligeramente diferente al que se fabricaba: se le montaron una ruedas algo más anchas atrás y llantas de aluminio. Y hasta Hutch demostraba su envidia verde cuando le llamaba 'tomate a rayas'.

5.- Peugeot 403. La tartana (Colombo)

Tan desastroso como su dueño. El detective aparentemente despistado llevaba un coche muy acorde con él, descuidado y sucio. Falk, el actor que encarnó a Colombo fue el encargado de elegir el coche y eso, a pesar de que, en un principio no estaba muy convencido de que a su personaje le hicieran falta más artificios (con el cigarro y la gabardina tenía bastante). Recorrió el garage de Universal buscando el vehículo adecuado y ahí estaba: El coche era un Peugeot 403 convertible modelo 1959 (del que solo se construyeron 504 en Francia). Cuando la serie se canceló se vendió y cuando quisieron recuperarlo tuvieron que buscar entre varios coches cuyos dueños garantizaban que eran el orginal. Al final, el auténtico fue localizado en Ohio.

6.- MK IV British Leyland Mini 1000. El más gracioso (Mr. Bean)

¿A quién no le gusta un Mini? Son pequeños y cómodos, sobre todo para aparcar, pero Mr. Bean fue capaz de dar a su coche usos inimaginables. Hasta pasearse atado a una butaca encima del coche. Es un clásico y lo sigue siendo. Si a eso añadimos que era amarillo y que, a pesar de su tamaño, es un coche muy potente lo hace un vehículo tan particular y divertido como su dueño. Este modelo, además, ha participtado en algún rally que otro.

7.- BMW Isseta. El 'huevo' de Urkel (Cosas de Casa)

Que los guionistas, productores, o a quién corresponda elegir el modelo optan por los coches de acuerdo con el personaje, es indudable. Y este es un claro ejemplo. El famoso 'huevo' de Urkel era, en realidad, ni más ni menos que un BMW. Este Isseta tenía la particularidad de su puerta frontal, muy curiosa y a pesar de su origen italiano (en un primer momento lo fabricó Iso) viró a BMW y es como, finalmente, ha pasado a la historia. Además, fue todo un clásico en la posguerra y una garantía de fiabilidad.

8.- Checker Marathon. Versión taxi ( Friends )

Es el coche de la particularísima Phoebe. Lo heredó de su abuela y lo usa de manera ocasional. En él se viven algunas de las aventuras de la serie, como cuando se quedan aislados en la nieve en medio de la nada o el viaje que hace Joey para volver de un rodaje de los Ángeles a Nueva York. La curiosidad viene porque es el mismo modelo que usa el personaje de Robert de Niro en Taxi Driver. Nunca dos personajes tan dispares tuvieron un coche (y su versión taxi) en común. Lástima que Checker, la marca de este vehículo, se declaraba en bancarrota.

9- Autocaravana Fleetwood Bounder. Va sin 'meta' dentro (Breaking Bad)

Son varios los coches que van y vienen en la ya más que mítica 'Breaking Bad'. El Beetle de la hermana de Skyler y el Chevrolet Monte Carlo de Jesse pueden que sean los más reconocibles. Hay más pero ninguno como la autocaravana en la que Walter y Jesse comienzan a fabricar la metanfetamita. Allí es donde le dan su color azul y a su sombra es donde matan y secuestran a los dos 'narcos' de poca monta que intentan asesinarles. Es el primer cuartel general y, de todos los vehículos de la serie, el que más ha calado en el imaginario coletivo.

10.- Chevrolet Impala 1967. Muchos kilómetros (y rock) para cazar fantasmas (Sobrenatural)

Desde luego el coche es fiable, y no solo por la cantidad de kilómetros que lleva encima, sino porque el pobre acaba poseído por fantasmas cada dos por tres. Este Chevrolet Impala es el vehículo de Jonh Winchester, padre de Dean y Sam. Es el primero de ellos al que se lo cede y es él el que lo quiere como si fuera de su familia. Gracias a que la serie ha cumplido los 10 años y, a pesar de que en EEUU este modelo es muy conocido, ha conseguido traspasar fronteras. Junto con la BSO en casette (AC/DC, Black Sabbath, Metallica...) el Chevrolet Impala ya forma parte de la iconografía de Sobrenatural. Y eso que tiene un par de inconvenientes: 1, discreto no es; 2, va y viene de la serie como el Guadiana.

11.- Volkswagen modelo T2. Con el logo cambiado (Perdidos)

Su presencia es fugaz, pero graba un recuerdo imborrable en los espectadores de 'Perdidos'. Es Hurley quién la encuentra en medio de la selva (3x10 'Tricia Tanaka is dead') y consigue hacerla funcionar para regocijo y momento espectacular de varios personajes. Uno de esos escasos momentos de felicidad y relax que proporciona la Isla. Es una Volkswagen, aunque el guionista cambia la W original por el logo de la iniciativa Dharma. Aún así, no consigue engañar a nadie ya que su aspecto es inconfundible, sobre todo si has visto 'Pequeña Miss Shunsine'.

12- Citroën DS. Un coche peculiar para alguien peculiar (El Mentalista)

Elegante, llamativo... este es un modelo muy poco conocido en EEUU pero bastante reconocible por los europeos, sobre todo en Francia. Le llaman el 'tiburón' por culpa de ese diseño tan agresivo como vanguardista. Es un clásico de los años sesenta recuperado para una serie del siglo XXI.