Borrar
Pintura mural de la iglesia de Nuestra Señora de la Peña, en Ágreda (Soria).
Pinturas murales de Segovia, Valladolid y Soria, el arte escondido del siglo XV

Pinturas murales de Segovia, Valladolid y Soria, el arte escondido del siglo XV

Una tesis de un investigador de la UVA sobre 46 conjuntos murales del siglo XV en las tres provincias alienta a divulgar un tesoro artístico poco conocido

JESÚS BOMBÍN

Sábado, 27 de febrero 2016, 14:03

Sergio Núñez Morcillo ha dedicado ocho años de su vida a sumergirse en el contexto histórico, social y artístico del siglo XV con el propósito de conocer el ambiente en el que se crearon las pinturas murales de tres provincias de Castilla y León. Su investigación, dirigida por el doctor Fernando Gutiérrez Baños, del departamento de Historia del Arte de la Universidad de Valladolid, se centra en las provincias de Valladolid, Segovia y Soria por tratarse de un área geográfica carente de los estudios realizados en otros territorios de la región.

El investigador de la Facultad de Filosofía y Letras de Valladolid ha volcado toda la información que ha recopilado en una tesis, un reto científico que se concibió como continuación del trabajo de investigación elaborado por su tutor y orientado al estudio de la pintura de estilo gótico lineal en la comunidad. La tesis tenía por objeto identificar y dar sentido a unos murales que presentan, en buena parte, en opinión de Sergio Núñez Morcillo, un mal estado de conservación. Otro de los propósitos era hacerlos cercanos y entendibles a la sociedad, para lo que ha tenido que definir la evolución del estilo de estas obras de arte en una época en que «dicha manifestación pictórica había perdido su originaria posición de vanguardia en favor de la pintura sobre tabla», sostiene.

El estudio que ha acometido delimita también las conexiones entre ambas modalidades pictóricas en función del soporte en el que fueron creadas y ha definido un mapa de la pintura mural tardogótica en las tres provincias, de modo que, sugiere, pudiera ser utilizado como un catálogo de obras orientado a profundizar en el programa iconográfico y en los caracteres estilísticos de cada conjunto mural. Al investigador le llamó la atención el desinterés hacia una manifestación pictórica «apenas atendida y considerada por parte de la historiografía española al ser valorada como un componente subordinado a la arquitectura». Tampoco le pasó desapercibida la escasez de reseñas bibliográficas y documentales, un hecho que atribuye al «mayoritario desconocimiento de una modalidad pictórica que, en muchos casos y hasta fechas recientes, ha permanecido cubierta por películas de encalado e incluso por retablos muebles debido a las reformas emprendidas en los templos en los siglos del Renacimiento y del Barroco».

En este panorama de obras de arte que han pasado desapercibidas ante la pujanza de lo arquitectónico, los retablos y las esculturas de las iglesias, el investigador constató el gran desconocimiento de pinturas murales que clasifica en dos modalidades: por un lado, las que llevan décadas siendo visibles porque fueron descubiertas hace años o nunca han estado tapadas y «apenas son reseñadas en fuentes de ámbito temático especializado». Por otro, y son las más abundantes, figuran las pinturas halladas en fechas recientes, de las que no existen más referencias que las memorias de intervención de los conservadores, y cita como ejemplo las de la iglesia de San Andrés de Fuentearmegil, en Soria.

Sergio Núñez Morcillo ha fotografiado y documentado cada una de las piezas, haciendo referencia a las técnicas y circunstancias de conservación así como a su marco histórico y eclesiástico. Encuadra las pinturas murales analizadas, en su mayor parte, como pertenecientes a los estilos italogótico, gótico internacional y gótico hispanoflamenco. Otro de los aspectos que aborda el trabajo se refiere a la influencia de la localización de la pieza en el ámbito arquitectónico de la iglesia y su funcionalidad. «La decoración de los paramentos y pilares de los templos no se hacía de un modo espontáneo, sino que se adecuaba a unas directrices a las que en la actualidad no prestamos atención alguna debido a nuestro alejamiento respecto a la mentalidad religiosa de la Edad Media». Así, observa Núñez Morcillo cómo la situación de la obra pictórica en un edificio estaba estrechamente vinculada a si fue concebida para ser exhibida en capillas mayores, pilares y muros laterales, altares y capillas privadas, claustros o pórticos.

En alguna ocasión la catalogación estilística se ha realizado a través de elementos formales como motivos floreados o representaciones de paramentos insinuados con motivos rombales, unas particularidades estilísticas que han permitido junto con la ayuda, en ocasiones, de elementos arqueológicos (atuendos, armamento o instrumentos musicales) y de los escudos, la catalogación temporal de las obras pictóricas.

Humedades y desprendimientos son las principales patologías relacionadas con el estado de conservación de los muros, que tienen una incidencia directa en los conjuntos murales. De ahí que, además del reto investigador, el otro fin que ha alentado el trabajo de Sergio Núñez Morcillo es que la información recopilada sirva de llamamiento en favor de la preservación de este patrimonio. «Hay que acometer labores de conservación y restauración concluye promovidas por organismos autorizados y ejecutadas por manos y empresas expertas».

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elnortedecastilla Pinturas murales de Segovia, Valladolid y Soria, el arte escondido del siglo XV