Una procesión de kilos de solidaridad

Los vecinos del barrio palentino del Ave María vieron discurrir ayer por sus calles una procesión un tanto atípica, ya que en lugar de la imagen de un santo, un Cristo o una Virgen, lo que portaban los costaleros de la Hermandad de la Sentencia y Esperanza era una parihuela repleta de kilos de alimentos no perecederos, ropa y juguetes.

Bajo el nombre 'I Ensayo Solidario-Échanos kilos', la Hermandad de la Sentencia y la Asociación de Vecinos del Ave María celebraron ayer una recogida de alimentos en favor de las personas más necesitadas del barrio.

La cuadrilla de costaleros portó la parihuela durante cerca de dos horas y media por las calles del barrio como realizan normalmente en sus ensayos, pero con la diferencia de que esta vez, en lugar de los sacos de arena que suelen llevar, cargaron con toda la comida, ropa y juguetes que fueron recogiendo a lo largo del trayecto gracias a la solidaridad de los vecinos del Ave María y de otros barrios que quisieron colaborar.

El recorrido comenzó en la sede de la hermandad, donde los costaleros pusieron rumbo hacia la parroquia del Ave María. Allí se descargaron más de dos toneladas de artículos que se habían ido recogiendo a lo largo de toda la semana. Los participantes hicieron otras cuatro paradas más para incorporar los alimentos, ropa y juguetes que la gente les iba donando hasta volver de nuevo a la sede de la cofradía. En todas sus paradas, así como en el inicio y fin del ensayo, bailaron los integrantes del Grupo de Danzas del Ave María. Asimismo, la Banda de Cornetas y Tambores del Santísimo Cristo de la Buena Muerte amenizó todo el recorrido con su música.

«Estamos muy contentos con la respuesta de todos los vecinos, ya que hemos conseguido cerca de cuatro toneladas de artículos», señalaba ayer satisfecha Raquel López, secretaria de la Asociación de Vecinos del Ave María, quien explicó que todos los artículos recogidos se dejaron en la parroquia del barrio y que el párroco será el encargado de repartir los alimentos y demás objetos entre las familias más necesitadas de esta zona de la ciudad.

«El año pasado organizamos una actividad similar y conseguimos 3.600 kilos, así que este año hemos superado las expectativas», agregó satisfecha Raquel López, quien adelantó que, ante los buenos resultados obtenidos, ya piensan en celebrar una iniciativa parecida el próximo año.