La Policía atribuye a un acto de gamberrismo la agresión a una pareja gay

La Policía Nacional de Palencia ha descartado que la agresión física y verbal de la que fue víctima el pasado sábado un matrimonio homosexual en plena calle tenga tintes homófobos y la atribuye a un acto de gamberrismo cometido por dos hombres que se encontraban en estado ebrio y que instantes antes habían molestado igualmente a otros transeúntes. Según la Policía, los dos autores de la agresión fueron identificados en el lugar de los hechos, sin que se apreciasen signos de lesiones en el matrimonio homosexual, por lo que la Policía Nacional no procedió a su detención.

Según señalaron las víctimas, Adolfo Infante y su marido, los hechos ocurrieron sobre las 21:00 horas en la avenida Modesto Lafuente, cuando los dos hombres les agredieron física y verbalmente al grito de «¡sois maricones, maricones, hijos de puta!», según se recoge en la denuncia interpuesta por los agredidos.

La agresión se produjo cuando Adolfo y su marido caminaban tranquilos por la avenida Modesto Lafuente de la capital palentina, cerca de la Plaza de España, para coger su coche aparcado en las inmediaciones del Centro de Salud La Puebla y retirarse a su casa. Dos hombres de unos 40 años según calcula el agredido caminaban hacia ellos por la misma acera y al llegar a su altura les cogieron del brazo. «No les conocíamos de nada, así que les apartamos el brazo y fue en ese momento cuando empezaron a gritarnos ¡Sois maricones, maricones, hijos de puta!», relató Adolfo Infante.

«Fuera de sí, empezaron a darnos patadas y puñetazos, nosotros conseguimos esquivar los primeros puñetazos y echamos a correr, pero a mí lograron alcanzarme mientras llamaba por teléfono a la Policía para denunciar los hechos y para que vinieran a ayudarnos», señaló Infante. «Cuando me dieron alcance, uno me agarró y el otro empezó a darme puñetazos en la cara, en la cabeza y en la barriga», indicó Adolfo Infante, quien recordaba haber visto a uno de sus agresores levantar el brazo y gritar «¡arriba España!» mientras rebuscaban en un contenedor para ver si encontraban un objeto con el que agredirlos. «Mi marido también recibió golpes en la nariz y en la cara, pero parece que solo son contusiones», afirmó el afectado.

Por otra parte, la Fundación Triángulo de Valladolid ha emitido un comunicado en el que condena esta agresión y reclama a la autoridad pública que no mantenga «actitudes de tibieza» con las «crecientes demostraciones de agresividad de los grupos de la ultraderecha intolerante, pues permitir este tipo de conductas solo puede conducir a la ruptura de la paz social»».