Los puentes del Canal se refuerzan un año después del accidente de Naveros

«Si el accidente hubiera ocurrido hoy, no se hubieran matado». Este era el sentir general de los vecinos cuando se va a cumplir mañana un año del trágico accidente en el que tres mujeres y tres menores murieron al caer su coche al cauce del Canal de Castilla en Naveros de Pisuerga. La imagen que ofrece no solo la esclusa donde ocurrió el siniestro, sino también la de los puentes de los municipios cercanos por los que también atraviesa el cauce, dista mucho de la que se podía observar el 11 de agosto del año 2012. Todos los puentes ya tienen al menos petriles, las piedras se han recuperado del agua y se han vuelto a colocar, y en todos los casos se ha colocado una doble baliza que prácticamente impide que un vehículo pueda caer al agua. Además, la señalización se ha reforzado. Los carteles de cruce muy peligroso que ya existían y recomendaban una velocidad de entre 20 o 30 kilómetros por hora, se complementan ahora con señales luminosas y bandas sonoras en las carreteras.

Tras el accidente ocurrido hace exactamente un año en Naveros, la Diputación, propietaria de la carretera PP-6112, reforzó la señalización y las barreas de seguridad, con una inversión de 27.000 euros. Además, concedió una subvención de 20.000 euros al Ayuntamiento de Herrera para señalización y balizamiento del camino a Zarzosa a su paso por Ventosa. Esta inversión ha cambiado totalmente el panorama del puente situado sobre la fatídica esclusa número 13 y, a pesar de que la carretera sigue siendo estrecha y la curva muy cerrada, al menos existe una protección para evitar que caigan al agua. A pesar de todo, los alcaldes de la zona reconocen que es insuficiente y tienen puesta su vista en un proyecto que permitirá ensanchar los puentes de Olmos y Ventosa de Pisuerga. «Por estas zonas pasan muchos vehículos agrícolas y camiones y no caben. Hay que recorrer más de 10 kilómetros. Se trata de ensanchar los puentes alrededor de un metro y medio y colocar las mismas piedras. La CHD tiene que dar su visto bueno, porque el Canal es Patrimonio Histórico, y la financiación intentaremos que podamos pagarla entre todos, con dinero de la Diputación, que aporte algo la Junta y también los ayuntamientos afectados». El alcalde de Naveros de Pisuerga, Carlos Rey, reconoce que el conflicto de competencias entre el organismo hidráulico, que es el responsable del Canal de Castilla y las diputaciones de Burgos y Palencia, propietarias de las vías, dificulta enormemente cualquier solución. «Se pasan la pelota de uno a otro y al final ninguna termina de implicarse», señala el alcalde de Castrillo de Riopisuerga, Carmelo Dehesa. El regidor de este municipio de apenas 20 habitantes ha decidido financiar con su escaso presupuesto un nuevo puente que costará 60.000 euros y que evitará que los vecinos, cada vez que entren o salgan del pueblo, tengan que hacer equilibrismos en una curva cerrada y un puente excesivamente estrecho. «El problema ya no es el dinero, lo vamos a pagar desde el Ayuntamiento, sino los permisos. Solo encontramos obstáculos en las administraciones, hablan de competencias pero nadie nos da soluciones», agrega Dehesa.

Los vecinos de los pueblos ribereños han sentido durante muchos años la sensación de pasar sobre un alambre sin red al circular andando, en bici o en coche sobre puentes con petriles destruidos y sin barreras que separen la carretera de las aguas . Esa fotografía que hace solo doce meses recordaba a unos restos totalmente destruidos de algún antiguo puente que ya prácticamente no existe. Las piedras recolocadas en su sitio y las dobles balizas han cambiado el paisaje. Pero no es todo satisfacción para los vecinos, que mantienen la tristeza por el accidente del que mañana ya se cumple un año y lamentan que esa seguridad no llegara antes. Al fin y al cabo, en la esclusa 13 han muerto catorce personas en tres accidentes desde 1973, «aunque no fue hasta el 11 de agosto de 2012 cuando se dieron por enterados del peligro», confiesa un vecino.

Por otra parte, desde la Confederación del Duero se insiste en que el mantenimiento de los puetos no es de su competencia. «Cualquier nuevo puente que se pueda construir y el mantenimiento de los puentes actuales son competencia directa del titular de la vía pública». Con estas palabras, el presidente de la Confederación Hidrográfica del Duero, José Valín, quiere dejar bien claro que este organismo no tiene la atribución de construir o financiar cualquier tipo de obra que se quiera llevar a cabo en los puentes sobre el Canal. «No obstante, sin perjuicio de las competencias, la Confederación ha recolocado las piedras caídas en algunos pretiles».