Cerca de medio millar de personas participan en la marcha a beneficio del club

El Caja Segovia Fútbol Sala disputa desde hace menos de un año uno de los partidos más importantes y decisivos de su historia. Lucha con todas sus fuerzas por sobrevivir y para evitar que desaparezca el club con más títulos de la ciudad. Mientras aparece el anhelado patrocinador, la entidad se ha puesto manos a la obra para demostrar que el Caja continúa estando muy vivo. Los mosaicos con globos y cartulinas que se han realizado en algunos partidos de esta temporada o la exposición de pintura próxima, iniciativas impulsadas por la propia afición, el cuerpo técnico o la junta directiva, están sirviendo para acercar el club a la sociedad segoviana y llamar la atención sobre la difícil situación en la que se encuentra.

De lo que no hay dudas es de que Segovia está detrás de su equipo y le respalda hasta las últimas consecuencias. En un domingo de primavera pero de tiempo invernal, cerca de medio millar de personas participaron en la marcha que había convocado el Caja. Aficionados, técnicos y jugadores, tanto del primer equipo como de las categorías inferiores, compartieron una caminata hasta la explanada de Robledo en la que todos se pusieron de acuerdo en recordar que Segovia no se entiende sin el Caja. Más de 600 pases se consiguieron vender por la marcha, aunque las bajas temperaturas registradas empujaron a algunos a quedarse en casa.

Los que sí se animaron a participar subrayaron su fidelidad a unos colores. Los hubo que acudieron a la salida, realizada en el pabellón Pedro Delgado, ataviados con camisetas históricas del Caja, bufandas e incluso banderas. La caminata hasta Robledo duró aproximadamente una hora y una vez allí los participantes disfrutaron de un pequeño avituallamiento y siguieron atentos el sorteo de regalos que se llevó a cabo. Puesto que la meteorología no invitaba a entrenerse mucho, rápidamente se puso rumbo de vuelta hacia Segovia por el mismo sitio, por el carril bici junto a la carretera de La Granja.

Fue un acto de fiesta para el Caja Segovia, que pudo comprobar sobre el terreno la importante masa social que tiene detrás y que le va a ayudar a salvar las dificultades que se ha encontrado en los últimos meses al haberse quedado sin su principal patrocinador.