Los ladrones dejan inutilizable el portón del kiosco-bar de la Sala Cultural y de Exposiciones de Pedrajas de San Esteban

Si días atrás fue la escuela de educación infantil de 0 a 3 años Babylandia el lugar donde, tras romper una de las ventanas de la cocina, los amigos de lo ajeno accedían amparados en la oscuridad de la noche, sin logran mayor botín que los destrozos, la madrugada de este pasado viernes era otra dependencia municipal en el que fijaron sus ojos para llevar a cabo su fechoría.

En este caso fue el bar-terraza de la Sala Cultural y de Exposiciones municipal, en el que los ladrones dejaron como saldo, ya que el botín que se llevaron fue únicamente tres botellas de licor de diferentes marcas y dos cajas de botellines de refresco de cola y un puñado de monedas de 5, 2 y 1 céntimo de euro, la inutilización de la persiana metálica motorizada de gran tamaño que sirve como cierre del portón principal de acceso a la barra desde el mirador situado en el parque Jardines de Castilla, dejándola inservible por lo que deberá ser repuesta en los próximos días.

Los ladrones que actuaron sobre las 4 de la madrugada, según una vecina que a esa hora asegura haber escuchado varios golpes, tras intentar sin éxito forzando una de las persianas de uno de los portones laterales, por los que también se accede a la barra del bar de esta dependencia independiente pero integrada dentro del cubo metálico que es la Sala Cultural y de Exposiciones pedrajera que también es utilizada como Oficina de Turismo, optaron por el portón grande, donde tras forzar con una barra de uña desencajar la persiana de los raíles por los que sube y baja, conseguían entrar no sin antes toparse en su camino con el golpe de varias sillas que el hostelero que regenta el bar-terraza, que cerró temporalmente la actividad hace ya más de un mes con la llegada del frio, tiene almacenadas hasta su utilización con la llegada de la primavera.

La fechoría fue descubierta por una joven que pasaba por allí sobre las 8 de la mañana, quien lo puso en conocimiento del personal laboral de los servicios municipales, que a esa hora iniciaban su trabajo, y estos a su vez una vez desplazados al lugar para ver el alcance del robo y acto vandálico lo ponían en conocimiento de la Policía Local, la Guardia Civil, el alcalde y el hostelero responsable de la explotación de dicho bar-terraza.