Más de mil personas protestan contra los gastos militares y los privilegios reales

La visita de los Reyes ha conmocionado a la ciudad de Valladolid, aunque no todos han recibido a los monarcas con el mismo entusiasmo. Varios miles de personas más de tres mil, según los organizadores y 600 según la policía se han manifestado por el centro de la ciudad para exigir la eliminación de los gastos militares y la supresión de los privilegios reales. La comitiva ha partido de la Acera de Recoletos (esquina Colmenares) poco antes de las 12:30 horas, con sesenta minutos de retraso y bastantes más adhesiones de las esperadas y, cual reptil serpenteante, ha ido recorriendo las catorce calles del recorrido autorizado por la Subdelegación del Gobierno hasta alcanzar la Plaza de Portugalete.

Alrededor de dos horas de consignas y vítores y también de cortes de calles, que han provocado una mayor densidad de tráfico en algunas de las travesías del centro (San Luis, Don Sancho, plaza Circular...), que la generada por los límites impuestos a la circulación en los aledaños de la Plaza Mayor. El artista Manolo Sierra ha sido el encargado de dar lectura al manifiesto con el que hora y media después de dar los primeros pasos se ha puesto fin a una marcha, en que han participado activamente los tres concejales de Izquierda Unida, Manuel Saravia, María Sánchez y Alberto Bustos.

A los representantes municipales de la coalición se han sumado los de los otros 20 colectivos convocantes (vecinales, anarquistas, republicanos y de izquierda, en su mayoría), que han seguido durante todo el recorrido la gran pancarta en la que podía leerse 'Ni privilegios reales, ni gastos militares. Servicios públicos y sociales' y defendido «la eliminación de los dispendios superfluos y de las injustas prerrogativas de la realeza, especialmente injustos e indignantes en unos momentos como estos, en los que se está recortando en asuntos como la salud y la educación». Las palabras de la representante de Izquierda Castellana, Doris Benegas, quien también encabezó la manifestación antimilitarista de Valladolid, del Día de las Fuerzas Armadas de 1984, resumen el sentir de los manifestantes, aunque muchas de las consignas gritadas o impresas en los carteles fueron bastante más explícitas e incisivos: 'Gastos militares para escuelas y hospitales', 'Trabajo basura para los reyes y los curas', 'Borbón, mangante, deja el elefante', han sido algunos de los eslóganes de una jornada protagonizada por los paquidermos, presentes en forma de disfraces, trompas, fotografías y dibujos.