Rafael Cano, la plaza que pintan todos los niños de Primaria

La plaza de Rafael Cano, el corazón de Pilarica, es un espacio que puede presumir de ser la plaza, plaza por antonomasia, el modelo que elegiría cualquier niño de Primaria al que le pidieras que dibujara una plaza. Aquí está todo. Están los bancos (14) con sombra (de 29 árboles) para que los paseantes puedan tomarse un respiro. No falta el caño de agua ni la cabina telefónica (algo que escasea, cada vez más, en las calles de la capital). La plaza tiene su zona de columpios, con toboganes donde los niños se dejan la infancia y los pantalones. No puede faltar el quiosco, claro. Ni siquiera la iglesia, el templo de Nuestra Señora del Pilar que desde hace un par de años ha rejuvenecido con la llegada de don Fernando. «Es un fenómeno», aseguran los vecinos. «Ha arreglado la iglesia, la gente viene encantada a misa... y las campanas suenan estupendamente». Y claro, los bares. Toda plaza que se precie debe tener uno. O incluso dos. Aquí mandan el Raúl y el Pilarica.

El primero pertenece a los Centeno, una estirpe clásica en la plaza ya que Luis, el padre, regentaba la carbonería que durante años alimentó las calderas del barrio y de buena parte de las casas del centro de la capital. El local ocupado entonces por la carbonería de Luis se ha repartido ahora entre el bar de su hijo Raúl y el túnel de lavado de José, su otro hijo.

El otro bar es Pilarica, de José Luis Centeno, sede de la peña Pilarica. la lista de negocios de la plaza se completa con la armería Crespo y el quiosco.

¿Y por qué Rafael Cano? Pues en honor a un catedrático de la facultad de Derecho de la Universidad de Valladolid. Sin embargo, no son sus méritos académicos los que le han otorgado la calle, sino el hecho de ser el marido de Tadea Prado, la mujer que financió la construcción de la iglesia del Pilar, inaugurada el 12 de octubre de 1907.

Estas son algunas curiosidades de la plaza de Rafael Cano, el rincón de Valladolid que este lunes visita la sección A pie de calle de El Norte de Castilla.