Entrepinares eleva su producción de queso el 25% con su nueva planta

.El reto para el futuro es hacer un queso sin materia grasa, que es una de las características de este producto, y además sin sal, que es el otro componenet básico de este derivado de la leche y para cerrar este círculo virtuoso, será además sin lactosa. Es casi, casi, producir un queso sin queso, pero el departamento de Investigación Desarrollo e Innovación de Queserías Entrepinares está precisamente en esa batalla, la de ofrecer un producto apto prácticamente para todos los consumidores, para los que pueden tomar lactosa, para quienes tienen problemas con ella e incluso, para quienes no les gusta el queso.

La compañía presentó ayer ante una treintena de directivos y representantes de empresas de Castilla y León integradas en el Club de Innovadores la política de innovación aplicada en los últimos años y que ha situado a esta quesería vallisoletana en la cúspide de la producción de estos derivados de la leche en España.

Entrepinares, lo recordó Carlos Tejedor Franco, director general de esta compañía incluida en el grupo de empresas familiares de Castilla y León, es en la actualidad el mayor operador de leche de oveja de España y en los últimos años ha conseguido el desarrollo y la aplicación de un proceso de congelación de la leche ovina, un producto ganadero con gran estacionalidad, de manera que la que se acopia en primavera puede utilizarse más tarde, en otoño. «Algo que permite homogeneizar el proceso de producción a lo largo de todo el año», apuntó Óscar Esteban Cabornero, director de Calidad y de I+D+i en Queserías Entrepinares.

Nuevos lanzamientos

Lo más destacado ha sido el crecimiento. La producción de sus dos nuevos lanzamientos, el queso Havarti, un producto en barra que se importaba de Dinamarca y sus quesos untables han supuesto un aumento de 8.000 toneladas en 2011. De Havarti, en el primer año de actividad en la factoría situada en Villalba (Lugo) se han elaborado cuatro millones de quilos y cinco millones más de las variedades untables que se comercializan, fundamentalmente, a través de la marca Hacendado de Mercadona. «Hemos desarrollado nuevos formatos que tratan de ajutarse a las tendencias de compra, de manera que ahora ofrecemos desde cuñas precortadas hasta quesos ya loncheados y en diferentes tamaños de envases», añadió Esteban Cabornero.

La entrada en servicio de la nueva planta, que se une a las existentes en Valladolid y en Fuenlabrada (Madrid) ha permitido cerrar el año 2011 con un total de 39.000 toneladas de queso trasladadas al mercado con una plantilla de 360 trabajadores y con unas ventas de 180 millones de euros, según los datos difundidos ayer ante los representantes del Club de Innovadores convocados en las instalaciones de la planta por la Fundación de la Excelencia Empresarial de Castilla y León.

Líneas de trabajo

El director de Calidad enumeró algunas de las líneas de trabajo en el departamento de innovación, que en los últimos años ha contado con un presupuesto de 2 millones de euros al año. «Buscamos disminuir el contenido grado, el contenido en sal, eliminar la lactosa, de manera que no exista limitación sobre quién lo pueda consumir, de manera que tampoco existirá en su elaboración ni derivados del huevo ni conservantes», puntualizó Óscar Esteban Cabornero. En la misma línea, trabajan en la monitorización «mediante procesos de medición objetivos» del proceso de coagulación de la leche, una actividad que ahora está en manos de los maestros queseros, que son quienes deciden cuál es el momento de corte de la masa.

Cambio en los procesos

La empresa nacida en Valladolid, donde todavía está la planta de mayor producción, en el polígono de Argales, presentó por último sus planes de innovación en procesos, de manera que se explicó a los asistentes cómo será el almacén inteligente que se ubicará en el centro logístico de Las Arenas, así como la automación de las líneas de envasado y el sistema de fabricación en Fuenlabrada del queso fundido en envasado continuo o la manera en la que se lleva a cabo la congelación de la leche. «El 95% de nuestra producción va al mercado nacional, pero queremos ir más allá», apuntó Esteban Cabornero